El gobierno de Javier Milei concretó una reducción del 7% en el personal de la administración pública en sus primeros once meses de gestión. Esta medida se enmarca dentro de una política de fuerte ajuste al Estado.
En total, se desvincularon 34.000 trabajadores del sector público a través de despidos, ceses de contratos y otras vías. La mayor parte de esta reducción se dio por el despido de empleados bajo la modalidad de contratos.
La Administración Pública Nacional (APN) experimentó una disminución de unos 20.000 puestos.
El recorte generó un ahorro de U$S 3.820 millones. El presidente Javier Milei había anticipado que planean recortar 75.000 puestos de trabajo en el Estado.
Entre diciembre de 2023 y octubre de este año, el personal de la APN se redujo en un 10%, mientras que en las empresas estatales la disminución alcanzó el 12,6%.
En la APN, se observó un descenso en los diversos tipos de vinculación laboral:
- Empleados de planta permanente y transitoria: una caída del 3,6%.
- Personal contratado bajo la Ley Marco: una reducción del 17,8%.
- Empleados con contratos LOYS (monotributistas): una reducción del 51,9%.
La reducción del gasto fue de U$S 2.060 millones en los contratos regidos por la Ley Marco, U$D 1.130 millones en la modalidad permanente y transitoria, y U$S 630 millones en los contratos LOYS.
Desde el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, liderado por Federico Sturzenegger, se afirmó que esta medida demuestra el compromiso del Gobierno con la reducción del gasto público y su determinación para cumplir con las promesas de eficiencia y austeridad.