Este martes, Santiago Cafiero se reunirá en Washington con el Secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken. La cumbre con uno de los funcionarios más cercanos al presidente Joe Biden será la única actividad oficial del canciller argentino en las 48 horas que permanecerá en los Estados Unidos.
La primera reunión de alto nivel entre los cancilleres ocurre con el contexto de la dura negociación entre el Gobierno argentino y el Fondo Monetario Internacional por la deuda de casi 45 mil millones de dólares tomada durante la gestión de Mauricio Macri.
“Trato de tener buenas expectativas y ojalá que tenga sentido y rinda frutos el encuentro”, dijo el presidente Alberto Fernández sobre la cumbre.
Cafiero viajará solo, recobrando por unos días la centralidad política que supo tener en el Gobierno nacional hasta su desplazamiento de la jefatura de gabinete tras las Paso por pedido de Cristina Fernández. En Washington, Cafiero será recibido por el embajador Jorge Argüello (otro “hombre del Presidente”), para preparar la bilateral con Blinken.
Fuentes de la Cancillería argentina dijeron a La Voz que en la cumbre se abordará “una agenda bilateral y política”, que repasará “toda la relación entre los dos países”. Se definió a la relación como “óptima, intensa y fructífera”.
Expectativa por el FMI
En el Gobierno evalúan que respecto al FMI, “el ala política de Biden es la que expresó más sensibilidad sobre el tema y quiere o dice querer colaborar con Argentina”, según comentó a este medio un funcionario nacional.
Mencionan otro elemento que Argentina pone en la mesa negociadora: el préstamo de 57 mil millones de dólares del FMI al gobierno de Macri tuvo un fundamento político y contó con el aval de la administración de Donald Trump.
“Seriamente, nadie piensa en el mundo que la Argentina puede pagar 19.000 millones de dólares entre capital e intereses (en 2022)”, dijo Fernández, en relación al cronograma de pagos acordado por la gestión.
“En términos políticos venimos consensuado con el FMI un nuevo programa porque el de Macri es impagable e incumplible y Alberto siempre dijo tenemos que crecer para pagar”, insisten desde Cancillería.
“En verdad debería acompañar nuestra propuesta porque hoy en día está llevando adelante un plan keynesiano de gran magnitud”, cree el Presidente sobre el gobierno de Biden.
“El Tesoro de los Estados Unidos, que tiene incidencia en el FMI, tiene una postura más ‘técnica’, y lo que queda claro es que si bien el FMI no es Estados Unidos, la política puede colaborar para encauzar el tema”, dijeron a este medio desde Cancillería, donde hay optimismo respecto a un apoyo estadounidense en las negociaciones por la deuda.
La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, por ahora ha sido impermeable a la propuesta argentina. El gobierno de Fernández cree que la política podría abrir puertas hoy cerradas en Washington.
“¿Por qué Estados Unidos no ayudaría al gobierno de Alberto? Es un presidente racional, democrático, moderado y dialoguista, que está tratando de resolver un problema que Trump generó”, analizó el funcionario consultado.
En Cancillería también entienden que para la post pandemia, el gobierno de Biden, en su segundo año de gestión, debería mirar un poco más hacia América Latina “donde Argentina puede colaborar”.
Preparativos
Cafiero estuvo el viernes en el Palacio Hacienda. Con Martín Guzmán repasaron números y argumentos a ser expuestos frente al Secretario de Estado de Biden. Las cartas ya están sobre la mesa y a la vista de todos. Ante los gobernadores, el ministro de Economía blanqueó las diferencias con el FMI en las negociaciones. “El punto medular”, dijo, “son las diferencias sobre el sendero fiscal”.
Y también dijo que al programa argentino que plantea “la continuidad a esta recuperación fuerte que la economía está viviendo”, el Fondo opuso un programa que “con alta probabilidad” detendría la recuperación y al que no dudó en definir como “un programa de ajuste del gasto real”.
Guzmán insistió en la necesidad de ir por más “apoyos de la comunidad internacional” y bastante de eso tiene la reunión Cafiero-Blinken.
Sobre los pronunciamientos favorables ya conseguidos (como el pedido del G20 al FMI para que discuta las sobretasas), Guzmán ha dicho que son “importantes” y “plenos”, pero a la vez reconoció que no incluyen “a toda la comunidad”.
El apoyo explícito de los Estados Unidos, por ejemplo, no ocurrió. El gobernador Axel Kicillof se preguntó, delante de Fernández, Guzmán y los gobernadores, si no es momento de revisar la estrategia de negociación de la deuda ante la falta de resultados.
“Me parece que Estados Unidos está siendo prudente. Hasta acá ha hablado poco sobre el tema. Excepto por González (consejero de Biden para América Latina), que días atrás tuvo unas declaraciones con las que le pedía al Fondo que salga de la ortodoxia y analice el caso argentino de otro modo. Pero no sé todavía, es más lo que se especula sobre Estados Unidos que lo que se sabe”.
Alberto Fernández
Cafiero llega la reunión con Blinken con algunos apoyos recientes a la postura argentina. El Papa Francisco y el Premio Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, reiteraron la necesidad de que los organismos crediticios aflojen la presión. Un grupo de legisladores demócratas también pidió un alivio en los sobrecargos.
La reunión con Blinken se inscribe en la apuesta al bilateralismo que pregona el gobierno de Alberto Fernández. A su regreso a Buenos Aires, Cafiero tiene 15 días para preparar las visitas de Fernández a Rusia y a China. El Secretario de Estado recibirá a Cafiero sabiendo que Fernández tendrá próximas bilaterales con Vladimir Putin y Xi Jinping.
