El Fondo Monetario Internacional (FMI) reiteró sus proyecciones para la economía argentina, estimando un crecimiento del 5,5% este año y una inflación anual que oscilará entre el 18% y el 23%.
Estas cifras, mantenidas sin cambios desde abril, se presentan a pesar de la desaceleración global y las señales de estancamiento económico a nivel local, según las consultoras privadas.
“Fuerte recuperación” según el FMI
Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del FMI, afirmó que las proyecciones de crecimiento para este año y 2025 se mantienen en 5,5% y 4,5% respectivamente, subrayando que “la economía argentina está experimentando una fuerte recuperación”.
Gourinchas presentó estas perspectivas en Washington, como parte del Informe de Perspectivas Globales (WEO), que analiza el ritmo de la economía mundial, la inflación y el comercio, incluyendo a países emergentes de América Latina.
El FMI atribuye este crecimiento a “mejoras en la confianza, en el crédito, los salarios reales y todo eso como resultado de un proceso de desinflación muy fuerte, muy exitoso hasta ahora”.
Se espera que la inflación para finales de este año se ubique en el rango del 18% al 23% anual. Según el economista, este es un “contexto muy sólido para la economía argentina”, una recuperación que se da después de un “año 2024 muy desafiante”. Las cifras proyectadas para Argentina duplican el promedio de la región, donde se prevé un crecimiento económico del 2,2% en América Latina y el Caribe para 2025.
El contraste con los pronósticos privados
A pesar del optimismo del FMI, los pronósticos privados en Argentina difieren.
El último relevamiento de expectativas de mercado (REM) del Banco Central anticipa un crecimiento del 5% para 2025, mientras que la consultora Equilibra proyectó una expansión nula en junio y espera un freno en el segundo semestre, con un crecimiento del 4,5% en 2025.
Adicionalmente, el índice industrial de FIEL registró una caída mensual del 1,2% en junio.
Desafíos persistentes y el apoyo del FMI
El propio FMI señaló desafíos para Argentina, advirtiendo en un informe reciente que la posición externa del país en 2024 era “más débil” de lo estimado en sus fundamentos, y que las reservas netas seguían siendo “críticamente bajas”. Los rendimientos de los bonos también se mantienen elevados, con el dólar oficial cotizando a $1.310 y el riesgo país en 773 puntos al momento del informe.
No obstante, y pese a la dificultad del gobierno para acumular reservas, el staff del FMI aprobó la semana pasada un acuerdo técnico con Argentina sobre la primera revisión del programa acordado en abril. Se espera que el directorio libere este jueves un desembolso de US$ 2.000 millones, aunque una parte de este monto, US$ 800 millones, se destinará al pago de comisiones e intereses que vencen este viernes con el organismo.
Panorama global: incertidumbre elevada
En el ámbito global, el FMI pronosticó una expansión económica del 3% para este año, un incremento respecto al 2,8% estimado en abril, aunque inferior al 3,3% registrado en 2024.
La inflación mundial se proyecta en un promedio del 4,2% para este año y del 3,6% para 2026.
El organismo advierte que la incertidumbre global “sigue elevada”, y que las “tensiones geopolíticas podrían interrumpir las cadenas de suministro globales y aumentar los precios de las materias primas”.
Estados Unidos, por su parte, crecería un 1,9% este año, mientras que el pronóstico para China mejora considerablemente hasta un 4,8%