El gobernador Martín Llaryora promulgó la Ley de Ficha Limpia en Córdoba. Esta norma, sancionada con un amplio respaldo tanto del oficialismo como de la oposición, busca elevar los estándares de integridad en el servicio público.
La ley prohíbe que personas con condenas judiciales en segunda instancia por delitos dolosos accedan a cargos electivos o puestos en el Ejecutivo, ya sean provinciales, municipales o comunales, así como a cargos partidarios.
Esta medida afecta a quienes hayan sido condenados por delitos previstos en el Código Penal de la Nación o en leyes especiales, ya sea por tribunales de Córdoba, nacionales, federales o de otras provincias.
La iniciativa surge de tres proyectos presentados por legisladoras de diferentes bloques, demostrando un esfuerzo conjunto en la búsqueda de consensos.
El gobernador Llaryora expresó su satisfacción a través de la red social X, felicitando a los legisladores por la sanción de la ley y reconociendo el trabajo de Gastón Marra en impulsar la iniciativa a nivel nacional.
Según el texto, la ley modifica artículos de la Ley N° 9.571, Código Electoral Provincial, y de la Ley N° 9.572, Régimen Jurídico de Partidos Políticos.
La norma establece que no podrán ser candidatos a cargos públicos electivos provinciales, municipales o comunales, ni a cargos partidarios, aquellas personas que hayan sido condenadas a penas privativas de la libertad o a pena de inhabilitación por delitos dolosos.
Este paso, según el gobernador, busca promover la ética y la transparencia, asegurando que quienes aspiren al servicio público cumplan con los más altos estándares de integridad.
