El gobierno de Javier Milei apeló formalmente el fallo de la Justicia Electoral que rechazó su solicitud de reimprimir las Boletas Únicas de Papel (BUP) para las próximas elecciones generales del 26 de octubre en la provincia de Buenos Aires.
La presentación fue elevada ante la Cámara Nacional Electoral (CNE), el tribunal que ahora deberá dirimir si prevalece la integridad operativa del cronograma electoral o el principio de representación efectiva de los candidatos.
El reclamo de La Libertad Avanza (LLA) surgió tras la renuncia de varios postulantes clave, destacándose la baja de José Luis Espert. La dimisión de Espert se produjo luego de que trascendiera que había recibido una transferencia bancaria de un empresario investigado por narcotráfico y lavado de activos, dejando a la fuerza con una oferta de candidatos diferente a la impresa en las BUP.
El argumento del Gobierno: “candidaturas no ficticias”
En su recurso de apelación, LLA enfatiza que la negativa a actualizar la boleta implica una afectación al derecho de los electores a elegir entre “candidaturas verdaderas y no ficticias”. El escrito gubernamental sostiene que existen precedentes de jurisprudencia y recursos técnicos que harían viable la reimpresión, incluso con los plazos ajustados.
El Gobierno, a través de LLA, desmiente que el operativo logístico resulte imposible si las autoridades gestionan las partidas presupuestarias disponibles. Además, advierte que la falta de actualización lesiona la representación democrática y puede inducir a error a miles de bonaerenses que votarán con boletas que ya no reflejan la situación real de los partidos.
La inviabilidad logística y el costo millonario
El tribunal bonaerense, que rechazó el pedido en primera instancia, argumentó que la reimpresión masiva resultaba “material, temporal y jurídicamente inviable”. El fallo fue firmado por los jueces Jorge Eduardo Di Lorenzo, Hilda Kogan y Alejo Ramos Padilla.
Para reforzar su decisión, el tribunal citó informes del Ministerio del Interior que estimaron en $ 12.169.655.000 el costo de una eventual reimpresión. Además del gasto, el proceso demoraría no menos de nueve días, generando un riesgo para la correcta celebración de los comicios y el principio de igualdad entre las fuerzas.
El Correo Oficial advirtió a la Justicia que la entrega de material a las más de 38.000 mesas del distrito debía concretarse al menos diez días antes de la jornada electoral para evitar demoras.
La CNE y la disputa por la cabeza de lista
Mientras se resuelve la cuestión de la reimpresión, la boleta de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires continuará mostrando a Karen Reichardt acompañada por la imagen del renunciante Espert.
Paralelamente, se desarrolla otra disputa judicial sobre quién debe encabezar la lista de Diputados Nacionales. El fiscal federal Ramiro González propuso a la CNE que se confirme la decisión de primera instancia y que Karen Reichardt sea quien finalmente encabece la lista.
González consideró que este es un caso singular sin antecedentes aplicables por analogía, ya que es la primera vez que se debe decidir el reemplazo del primer lugar de una lista de Diputados Nacionales por la renuncia del candidato varón que la lideraba.
No obstante, la CNE también solicitó la opinión de Ramiro González respecto a si Diego Santilli debería encabezar la lista, indicando que, según fallos anteriores, la Cámara podría pronunciarse a favor de que Santilli lidere la lista de diputados provinciales por LLA.
La Cámara Nacional Electoral deberá ahora definir si ordena medidas extraordinarias en favor de la representación efectiva o si mantiene el criterio de conservar la planificación logística de la elección.