En un contundente movimiento contra lo que considera un símbolo de corrupción de la era kirchnerista, el gobierno de Javier Milei anunció la disolución de la ex Ciccone Calcográfica, ahora conocida como Compañía de Valores Sudamericana (CVS).
Esta medida, que promete un ahorro anual de 5.040 millones de pesos para el Estado Nacional, fue anunciada por el vocero presidencial Manuel Adorni este lunes.
Adorni, en un comunicado a través de la red social X, calificó a la ex Ciccone como “uno de los grandes emblemas de la corrupción kirchnerista”. Esta decisión marca el fin de la producción de billetes por parte del Estado Nacional.
Por su parte, el ministro de Economía, Luis Caputo, aseguró que “se puso en marcha el operativo para el retiro de maquinaria, el cierre de las oficinas y se notificó la decisión a la dotación de personal afectada”.
“De esta manera, la Agencia de Administración de Bienes del Estado dispondrá del inmueble para la subasta y posterior venta. El mismo actualmente posee una bóveda de almacenamiento, que se utiliza para almacenar billetes que están próximos a ser destruidos y era utilizada por el Banco Central de la República Argentina (BCRA)”, dijo el funcionario en su cuenta de X.
Cabe destacar que la decisión de disolver la ex Ciccone ya había sido adelantada por el gobierno el 3 de octubre de 2024. El anuncio fue realizado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, durante una conferencia de prensa en la Casa Rosada.
Adorni justificó la disolución de la Compañía de Valores Sudamericana (CVS), ex Ciccone Calcográfica, argumentando que era un “recordatorio de uno de los casos de corrupción más grandes de las últimas décadas”.
También criticó la gestión de la Casa de Moneda bajo la administración anterior, calificándola de “ineficiente” y señalando sus “severas ineficiencias”. Al mismo tiempo, denunció un “despilfarro de recursos” en la Casa de Moneda, con deudas que ascendían a US$ 371 millones, un patrimonio negativo de US$ 78 millones y un resultado bruto negativo de US$ 20.500.000.
El Caso Ciccone
La ex Ciccone Calcográfica estuvo en el centro de un escándalo de corrupción que involucró al exvicepresidente Amado Boudou durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. El caso, conocido como “Caso Ciccone” o “Boudougate”, se centró en la adquisición irregular de la empresa, que en ese entonces tenía la capacidad de imprimir papel moneda, por parte de Alejandro Vandenbroele, quien habría actuado como testaferro de Boudou.
La denuncia inicial fue realizada por Laura Muñoz, esposa en el momento de Vandenbroele, quien acusó a Boudou de ser el verdadero dueño de la empresa. Tanto Boudou como Vandenbroele negaron estas acusaciones. Sin embargo, la investigación judicial, iniciada por el fiscal Carlos Rívolo y llevada adelante por el juez Ariel Lijo, culminó con la condena de Boudou por cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública en 2018.
La condena fue confirmada por la Cámara Federal de Casación Penal en 2019 y por la Corte Suprema de Justicia en 2020. Boudou cumplió parte de su condena en prisión y luego obtuvo la libertad condicional en 2021.
El gobierno de Milei enmarcó la disolución de la ex Ciccone como parte de un plan de reestructuración de la Casa de Moneda, buscando optimizar el gasto público y eliminar lo que considera vestigios de la corrupción del pasado.
