El Gobierno nacional espera el ingreso de capitales financieros por 7.800 millones de dólares en los próximos dos años, una de las principales fuentes de divisas junto con la inversión extranjera directa, el financiamiento del Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros organismos multilaterales, y el acceso a los mercados internacionales a partir de 2026.
Según los cálculos oficiales compartidos con el FMI, las inversiones de portfolio representarán U$S 4.800 millones en 2025 y U$S 3.000 millones en 2026, sin contar las amortizaciones de deuda a bonistas del exterior.
Se trata de fondos especulativos a los que este lunes el Banco Central le abrió la puerta para que entrar al mercado local si desean invertir en activos financieros, con la condición de que permanezcan durante seis meses corridos, es decir, hasta las elecciones, publicó Clarín.
Carry trade
En medio de la baja del dólar y la suba de tasas en pesos, el Gobierno apuesta a una nueva edición del carry trade con incentivos a las inversiones en moneda local.
El objetivo es llevar el tipo de cambio cerca de los $ 1.000 -el límite inferior de las bandas de flotación- y desalentar las expectativas de inflación en un año electoral, tras la devaluación del 10% del lunes pasado, la segunda desde el inició de la gestión de Javier Milei, aunque en los últimos días se vio compensada en parte por el retroceso del dólar.
La posible “lluvia” de dólares financieros contrasta con el limitado monto que aportaría la economía real. Según las cuentas oficiales y del FMI, la balanza de cuenta corriente (incluye intercambio de bienes, servicios y pagos de intereses de deuda) pasará de un superávit del 1% del PBI a un déficit del 0,4% del PBI en 2025 por términos de intercambio menos favorables, mayores importaciones y mayor flexibilización del cepo por la eliminación del dólar blend a los exportadores y el adelanto del pago a los importadores.
El Gobierno justificó el crédito del FMI de U$S 20.000 millones en que necesita afrontar “grandes necesidades” de financiamiento a mediano plazo debido a las obligaciones crecientes de la deuda del sector público con acreedores privados y oficiales (de U$S 15.000 a U$S 25.000 millones entre 2025 y 2029), así como a otras relacionadas principalmente con la acumulación de dividendos y deuda comercial (de U$S12.000 a U$S 18.000 millones).
Por otra parte, se estima que la Argentina obtendrá dólares para afrontar sus compromisos con el acceso a los mercados de capital, inicialmente con spreads de entre 400 y 500 puntos básicos (en línea con algunas empresas argentinas), según las proyecciones del Fondo.
La expectativa es colocar deuda en dólares a acreedores privados en el exterior por U$S 4.000 millones en 2025 y U$S 6.000 millones en 2026.