Los estrategas de Javier Milei decidieron imponer el color violeta en sus boletas para el 26 de octubre. Por contrapartida, el color amarillo luce fuerte en el tablero de la economía.
El Frente La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires -que integrarán seguidores del Presidente y del macrismo- llevará el tono violeta en sus principales destaques. También será el color dominante de las alianzas en otros distritos.
En tanto, la macroeconomía comenzó a enviar señales de que el programa oficial podría enfrentar tropiezos y desajustes.
El déficit externo -que refleja el ingreso y la salida de dólares- mostró un rojo de U$S 5.191 millones en el primer trimestre, en particular por turismo e importaciones.
Si salen más billetes que los que ingresan, es difícil que el Banco Central acumule reservas y, por ende, pueda garantizar el pago de la deuda.
El Gobierno sostiene que el balance de cuenta corriente se corregirá por las inversiones en hidrocarburos, con foco en Vaca Muerta (Neuquén), en minería y por la balanza comercial, que muestra superávit de exportaciones sobre importaciones, aunque el saldo decrece mes a mes.
En la cotización oficial, la moneda argentina perdió 55 pesos de valor esta semana frente al dólar. El blue cerró a $ 1.230, mostrando el apetito por el ahorro en esa moneda y por los viajes al exterior.
La fluctuación impacta en los precios, reduce el poder adquisitivo de los consumidores y genera inquietud entre los inversores.
El colchón no se toca
Las entidades admiten que es exiguo el ingreso de “dólares del colchón” en las cuentas bancarias.
La fuerte apuesta de Milei y de Luis Caputo no avanzó porque el Congreso no sancionó las leyes que eximen de penalidades a los ahorristas que usen los billetes atesorados fuera del circuito oficial.
Las comisiones de Economía de Diputados y del Senado están paralizadas, además de que se avecinan las vacaciones de invierno para los legisladores. El tema pasó a agosto, con suerte.
Es difícil que los proyectos se destraben antes de la elección legislativa, por lo que ese chorro de dólares que imaginó el Gobierno no llegaría al Banco Central (BCRA)
Tampoco el Fondo Monetario Internacional (FMI) está muy entusiasmado en aprobar la primera revisión del último acuerdo de facilidades extendidas.
El organismo habría objetado las ventas de dólar a futuro del BCRA y el incumplimiento de la meta de reservas pactada en el convenio.
Esta luz amarilla es la menos preocupante para el Gobierno, que estima el apoyo de Donald Trump para desactivar cualquier objeción del FMI.
La jueza y el Congreso
La luz parece convertirse de amarillo a rojo a raíz del fallo de la jueza norteamericana Loretta Preska, quien ordenó al Estado argentino entregar a los fondos Eton Park y Bulford el 51% de las acciones de YPF, por la violación del estatuto de la empresa en la estatización de 2012 (Cristina Kirchner-Axel Kicillof).
En las últimas horas, se sumaron otros acreedores, también con fallos favorables contra el Estado nacional.
¿Detrás del movimiento de la jueza está el interés de grandes petroleras de quedarse con el control de YPF y, por ende, de su desarrollo en Vaca Muerta?
Esta región atesora el cuarto reservorio mundial de petróleo no convencional (con una vida útil de 50 años) y el segundo de gas natural (con potencial por 150 años más).
Es imposible establecer si la jueza es parte de una estrategia global de las grandes petroleras o si más allá de la apelación y de la voluntad de negociación de Milei se esconde el objetivo del Gobierno de reprivatizar la empresa número uno del país.
Vaca Muerta no es sólo el asiento de una reserva estratégica de energía, sino un futuro garante de equilibrio macroeconómico, ya que prevé exportaciones por más de U$S 30 mil millones desde 2031.
Es otro “campo” para la Argentina.
Diputados y senadores de la oposición -empujados por el kirchnerismo y los gobernadores- también están dispuestos a acorralar al Gobierno con proyectos que implican la erogación de miles de millones de pesos para jubilados, universidades y administraciones provinciales.
La gestión de Milei enfrenta diversos conflictos, todos ellos de enorme impacto en las cuentas públicas, el principal capital electoral de las boletas violetas.
Más que nunca, necesita de gestión política para evitar un desmadre.