La cena anual de la Fundación Libertad, celebrada el lunes 28 de abril en el Goldencenter de Parque Norte, se convirtió en el escenario de un encuentro inesperado que captó la atención política: Mauricio Macri, líder del PRO, y Santiago Caputo, asesor estrella de Javier Milei, intercambiaron saludos y gestos, acompañados de risas.
El momento, registrado por el periodista Manu Jove en X, ocurrió en presencia del vocero presidencial Manuel Adorni, en un contexto de tironeos entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) de cara a las elecciones legislativas de 2025.
Un gesto que rompe el hielo
La relación entre Macri y el entorno de Milei, especialmente con Caputo y Karina Milei, ha estado marcada por desencuentros.
El expresidente ha acusado al asesor de bloquear acuerdos con el Gobierno y de ser responsable de decisiones polémicas, como la fallida licitación de la Hidrovía y el escándalo de la criptomoneda $Libra.
Por su parte, Caputo, figura clave del “triángulo de hierro” junto a Milei y su hermana, ha sido señalado por el PRO como un obstáculo para una alianza electoral.
Sin embargo, la dinámica cambió en la gala liberal. Caputo, quien ingresó al salón fumando y esquivando a los reporteros gráficos, tomó la iniciativa al acercarse a Macri, extendiéndole la mano.

El expresidente respondió con un abrazo y un comentario que provocó sonrisas, según relataron testigos a La Nación.
El gesto se repitió con Cristian Ritondo, diputado del PRO y principal negociador con el Gobierno, quien también compartió un abrazo y una charla distendida con Caputo, incluso fuera del salón mientras fumaban.
Discursos con mensajes cruzados
La ausencia de Javier Milei, quien declinó asistir alegando su reciente viaje al Vaticano, dejó a Adorni como orador principal en representación del Gobierno.
El vocero, candidato a legislador porteño por LLA, defendió la gestión libertaria, asegurando que “la inflación tiene su certificado de defunción firmado” y que los objetivos de Milei “se sobrecumplieron”.
También apuntó contra el kirchnerismo, al que calificó como “una banda de delincuentes en retirada”.
Macri, por su parte, centró su discurso en críticas al populismo, afirmando que “el Estado presente es una mentira” y que los populistas “entregan un gran presente a costa del futuro”.
Aunque evitó mencionar directamente a Milei, sus palabras resonaron como un mensaje velado sobre la necesidad de institucionalidad, un punto de fricción con LLA. El economista Alberto Benegas Lynch (h), cercano a Milei, también habló, elogiando la reducción del 30% en el gasto público y las desregulaciones del Gobierno.
Tensiones electorales de fondo
El encuentro se produjo en un momento crítico para las negociaciones entre el PRO y LLA. Macri ha expresado su frustración por la falta de avances en un acuerdo electoral, acusando al entorno de Milei de priorizar un proyecto de poder sobre uno de país.
La decisión de LLA de competir en la Ciudad de Buenos Aires, bastión del PRO, con Adorni como candidato, ha profundizado las diferencias. Macri cuestionó esta candidatura, afirmando que “ser buen vocero no basta para ser legislador; hay que conocer la Ciudad”.
En la provincia de Buenos Aires, Ritondo aboga por un acuerdo programático, mientras que fuentes libertarias sugieren que LLA podría optar por ir sola en 2025, considerando que su marca es más fuerte que la del PRO. La cena, que reunió a más de 1.100 invitados, incluyendo figuras como Federico Sturzenegger, Maximiliano Pullaro, Mirtha Legrand y Lilia Lemoine, reflejó la centralidad de esta pulseada en el espectro liberal.

¿Hacia una distensión?
El abrazo entre Macri y Caputo, descripto como “sorpresivo” por medios como Clarín, generó especulaciones sobre una posible tregua. Algunos analistas señalan que la elección porteña del 18 de mayo será clave para definir el futuro de la relación entre ambos espacios.