“El triunfo en la guerra no viene de la cantidad de soldados, sino de las fuerzas que vienen del cielo”. Javier Milei hizo suya esa cita bíblica allá por el año 2021, cuando la prensa le preguntaba cómo haría para instalar posiciones desde un bloque integrado por tan solo dos diputados, él y Victoria Villarruel.
Pasaron dos años y Milei pegó un salto descomunal que lo depositó en el sillón de Rivadavia, pero persiste el interrogante: cómo hará el nuevo presidente de la Nación para llevar adelante una gestión con extrema minoría parlamentaria (38 diputados y 7 senadores), sin gobernadores propios y con dirigentes que desembarcan por primera vez en la función pública.
Mientras van y vienen los nombres del futuro gabinete, La Libertad Avanza ajusta las clavijas para su desembarco como nuevo oficialismo en el Congreso, en un clima de incertidumbre total por la definición de cargos y la necesidad de tender puentes con otras fuerzas políticas desde una posición de debilidad.
El 7 de diciembre se realizará la sesión preparatoria de jura de diputados electos y la elección de las nuevas autoridades de la Cámara, que por ahora no encuentra salida. Es que Milei tensó la relación con el PRO al alentar el nombre de Florencio Randazzo, un peronista que, entiende, podría ayudar a ampliar su base de sustentación política.
El lunes por la noche, el futuro ministro del Interior, Guillermo Francos, encabezará una reunión con la tropa de legisladores, en la que aún no está confirmada la presencia de Milei. Antes de ganar el balotaje, Milei se reunió con sus diputados y senadores en dos oportunidades.
“La idea de algunos diputados de La Libertad Avanza es proponer a alguno propio. Uno de los nombres es el de Martín Menem (sobrino del expresidente, electo por La Rioja). Pero Randazzo hoy es el más fuerte, porque lo empuja Francos”, dijo a este medio un dirigente libertario.
La aparición de Randazzo (que cobró fuerza en los últimos días con una foto entre él y el diputado libertario electo Ricardo Bussi) complicó el vínculo con el macrismo en Diputados, donde el bonaerense Cristian Ritondo hizo todos los deberes para quedarse con la presidencia, desde colaborar activamente en la fiscalización del balotaje hasta fotografiarse con una motosierra.
Las tratativas entre el “ala dura” del PRO y La Libertad Avanza para formalizar un nuevo interbloque se enturbiaron por la irrupción de Randazzo, aunque cerca de Ritondo insisten en que él es el elegido y aseguran que solo falta que Milei lo anuncie.
Randazzo se llamó a silencio, pero en su entorno aseguran que habló con varios diputados de distintos espacios, no solo con Bussi. Su coronación como titular de la Cámara se sumaría a la de dos schiarettistas que asumirán en cargos nacionales, Franco Mogetta (Transporte) y Osvaldo Giordano (Anses).
De todos modos, la designación debe votarse en el recinto en la sesión del 7, y en Unión por la Patria (que será primera minoría con 105 diputados) hay quienes no están dispuestos a avalar tan fácilmente a alguien por fuera de La Libertad Avanza, que en definitiva fue el partido electo.
A su vez, se define cómo queda el tablero de la Cámara en cuanto a la conformación de los bloques. De concretarse la sociedad de los “halcones” con Milei, podría nacer un nuevo espacio de oposición moderada conformado por el radicalismo, la Coalición Cívica y otros espacios chicos, lo que pondría fin al interbloque Juntos por el Cambio tal como funciona ahora.
Cruzando el Salón de Pasos Perdidos la tensión no es menor, sobre todo por la posibilidad de que el peronismo, que también será primera minoría con 32 miembros, intente retener la presidencia provisional del Senado, segundo escalón de la línea sucesoria. Esa votación se realizaría el 5 de diciembre, dos días antes que la de Diputados.
En Unión por la Patria manejan el tema con sigilo. Cristina Kirchner estuvo toda la semana en su despacho del primer piso, lo que abrió especulaciones. En Juntos por el Cambio creen que la actual vicepresidenta seguirá orbitando el Senado después del 10 de diciembre a través de legisladores como Eduardo “Wado” De Pedro, Anabel Fernández Sagasti y Juliana Di Tullio.
Sin embargo, el jefe del Frente de Todos, José Mayans, afirmó que serán una “oposición responsable”. “Nosotros podemos tener mayoría, pero una mayoría responsable. Yo no hablo de una oposición sistemática, porque la oposición sistemática negativa no sirve. Yo creo que tiene que ser una oposición responsable, porque ese es el rol que nos dio la gente”, dijo al diario formoseño La Mañana.
Tanto en el Senado como en Diputados, tendrá influencia la nueva “liga” de gobernadores de Juntos por el Cambio, que se reunió esta semana en la Casa de Mendoza con el mendocino Alfredo Cornejo como anfitrión.
Allí, los mandatarios provinciales expresaron su “compromiso con el cambio y la gobernabilidad del país” pero también la necesidad de “controlar” la gestión. Manifestaron su “vocación de influir en el rumbo del país” y llamaron a “trabajar en conjunto con legisladores” manteniendo la unidad de Juntos por el Cambio.
En el Senado, donde el interbloque parece estar más firme que en Diputados, creen que el conjunto de gobernadores será “ordenador” a la hora de fijar posiciones y que será un respaldo importante para los senadores.
La contracara es que hay seis provincias donde la alianza opositora se quedó sin representación por el crecimiento de La Libertad Avanza: Jujuy, Formosa, La Rioja, San Luis, Santa Cruz y San Juan.
