308 días pasaron desde que los referentes de Juntos por el Cambio conformaron la Mesa Provincial, una entelequia que tenía como misión la institucionalización en términos “familiares” y con vocación “generosa”, y cuyo objetivo central era la redacción de un reglamento para definir las candidaturas en todo el territorio provincial; miles de cargos que siguen dependiendo de esa normativa imaginaria. “Hoy arrancamos en serio el proyecto provincial”, dijo Luis Juez aquel 21 de febrero.
Semanas antes, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich habían intimado a la franquicia local a sentarse a moldear el crisol del que emergería institucionalmente la coalición. Incluso, la titular del PRO dio plazos fatales: la alianza en marzo (de 2022) y el reglamento en abril de ese mismo año, comenzando a regir –era el plan original– a mitad de año, en las elecciones de Marcos Juárez.
“El que coquetee con Schiaretti puede irse con él”, dijo Bullrich en una reunión con los suyos por aquellos días. Quien terminó coqueteando fue su jefe Mauricio Macri, quien antes de viajar a Qatar se reunió con Martín Llaryora, el candidato que Juntos por el Cambio debe vencer si quiere gobernar Córdoba.
Cuando parecía que Luis Juez era el indiscutido candidato a gobernador y Rodrigo de Loredo, el número puesto para la Municipalidad de Córdoba, este último declinó esa postulación y lanzó su proyecto provincial; aún sin el respaldo (real y simbólico) de sus principales socios. El caso emblemático es el de Gustavo Bottaso, intendente de Hernando e histórico deloresista, quien convocó a elecciones para el próximo 26 de marzo, despegadas de las provinciales (aún sin fecha).
Una cena sobre el filo de la Navidad entre Luis Juez y Rodrigo de Loredo sirvió para que cedan las tensiones entre los socios del triunfo de 2021. Pero hay dudas en las otras tribus de la coalición, que observan con pocas chances de intervenir las idas y vueltas de Juez y De Loredo.
Aparentemente, tras la reunión, el estado de situación se retrotrajo a 15 días atrás, cuando habían acordado que el mecanismo de definición de candidaturas que predominaría sería el de las encuestas, siempre que la diferencia sea de 10 puntos entre uno y otro. En caso de un rango menor, se abriría la chance de una interna.
Este lunes, los dirigentes de todos los partidos de la coalición (en formación) se reunirán en Alto Botánico a las 19, invitados por Juez, en el marco de la serie de reuniones endogámicas que mantienen desde hace meses.
El miércoles será el día clave:en el sector de De Loredo quieren tener la certeza de que no habrá adelantamiento en la fecha de elecciones provinciales. Para eso seguirán el minuto a minuto de la reunión de Labor Parlamentaria previa a la sesión de la Unicameral.
“Estamos muy cerca de firmar, pero no estamos apurados. Si podemos cerrar la alianza y el reglamento antes de fin de año, será un buen gesto, pero no nos preocupa desde lo instrumental. Si el miércoles cambian la fecha, habrá que trabajar a contrarreloj”, explicaron en el campamento de De Loredo, reacio a firmar la alianza y dejar para más adelante el reglamento.
Cumbre Macri - Rodríguez Larreta
Este martes, Mauricio Macri recibirá en el country Cumelén, ubicado en Villa La Angostura, Neuquén, a Horacio Rodríguez Larreta y a “Nicky” Caputo.
Rodríguez Larreta llega empoderado como el nuevo “halcón”: el Gobierno nacional lo puso en ese rol al negarse a cumplir el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación respecto de los fondos de la coparticipación para la ciudad que él administra.
Antes de partir a Villa La Angostura, Macri se había reunido con Patricia Bullrich, presidenta del PRO y quien lidera varias encuestas, roles que la hacen sentir que la candidatura presidencial debe ser de ella, y no del jefe de Gobierno porteño, líder de las “palomas”, aunque ese rol quedó en crisis.
La presencia de Nicolás “Nicky” Caputo –aquel “hermano” de Macri– es un gesto central, ya que podrían comenzar a delinearse las reglas de una competencia entre Bullrich y Rodríguez Larreta. Como se recordará, Caputo siempre rechazó la estrategia del jefe de Gobierno porteño de entregarle la Ciudad a Martín Lousteau y los radicales de Evolución.
Está claro que Rodríguez Larreta llega al último día del año con el plus del fallo de la Corte (que le da la razón a su planteo) y la desobediencia del del Gobierno nacional al mismo; contexto que le dará una centralidad:será Rodríguez Larreta quien estará obligado a “defender la república”, caballito de batalla electoral de Juntos por el Cambio.
En el mundo PRO, también queda claro que más allá de que sea o no candidato, la centralidad del expresidente será determinante en lo que viene. Hoy, entre los dirigentes amarillos de Córdoba, el análisis es que Macri no se está moviendo como candidato.
Si algo dejó el Mundial para Juntos por el Cambio es esa imagen potente del emir Tamim bin Hamad Al Thani cruzando el palco oficial para estrechar en un abrazo a Macri, que demostró con ese gesto que sigue siendo el jefe de la coalición.
