En el interior provincial, uno de los focos del domingo electoral estará puesto en Embalse: un bastión peronista que elegirá intendente en medio de una fuerte disputa entre dos candidatos de esa fuerza política. EL Pj siempre gobernó esta localidad, sin excepciones, desde 1983.
Desde hace cuatro periodos es intendente Federico Alesandri, siempre por el peronismo cordobés. Pero este año fue candidato a gobernador por el kirchnerista Creo en Córdoba, por el que resultó único legislador provincial de esa lista.
En la Legislatura sucederá a su padre, Carlos Alesandri (71), que dejará la banca y se postula como candidato a regresar a la intendencia que alguna vez ya ocupó (hace casi cuatro décadas), con lo que de ganar sucederá en ese cargo a su propio hijo.
Alesandri padre fue intendente de Embalse entre 1987 y 1991. Luego, en un largo recorrido ocupó distintos cargos en los gobiernos provinciales de De la Sota y de Schiaretti: fue ministro de Seguridad, titular de la Agencia Córdoba Turismo, diputado nacional y legislador provincial, entre otros.
En el último tiempo, Carlos y Federico tomaron distancia del PJ schiarettista. De hecho, Federico se acercó al kirchnerismo albertista y Carlos no se presenta para la inrendencia con los sellos del PJ, sino por un partido local bautizado Somos Embalse.
“Podría jubilarme, pero estoy con fuerzas, con ganas y con salud para devolverle a Embalse todo lo que Embalse me dio. Es volver a donde todo empezó y estoy feliz con eso”, señaló el dirigente a este diario.
El principal contrincante en la contienda electoral frente a los Alesandri será Mario Rivarola (45), quien perteneció hasta no hace mucho tiempo al círculo cercano de ambos. En su aspiración por gobernar el pueblo, obtuvo el sello de Hacemos Unidos por Córdoba y el apoyo del gobernador electo Martín Llaryora.
En las redes y grupos de WhatsApp se instaló una campaña con munición gruesa entre estos dos postulantes y sus entornos: agravios, acusaciones cruzadas y denuncias anónimas, que se viralizaron con énfasis.
Rivarola asegura que ampliará en la municipal la brecha de las elecciones provinciales, cuando Llaryora obtuvo en Embalse el 43% de los votos y relegó al tercer lugar a Alesandri hijo para gobernador, con el 22%.
Carlos Alesandri, en cambio, asegura que la elección local será diferente y confía en su experiencia y la cercanía con la gente.
El tercero en disputa
El tercer candidato en competencia es Alejandro Vives (51), de Juntos por el Cambio, empresario turístico del rubro estudiantil y hotelero, quien incursiona por primera vez en política. Asegura que en la coalición que lo representa también hay una rama del peronismo.
Sus expectativas están centradas en captar el voto que apueste a un cambio a la continuidad de gobiernos peronistas de cuatro décadas. Asimismo, aspira a capitalizar la buena elección que hizo Juntos por el Cambio a nivel departamental, que le ganó al peronismo (también con fisuras) la pulseada para legislador por Calamuchita.
Unos 7.500 electores están habilitados para votar el domingo en Embalse.
En Río de los Sauces
La localidad del sur del valle de Calamuchita, gobernada desde hace 16 años por el radical Fabián Gigena, tendrá cuatro propuestas el domingo. Carlos Acosta, de Hacemos Unidos por Córdoba; Gimena Muñoz, de Juntos por Río de los Sauces; Mario Ferreyra, de Encuentro Vecinal Córdoba; y Naldo Zabala, de Partido Popular.
Muñoz, la candidata del oficialismo radical, es secretaria de Hacienda y pareja del actual intendente. Tanto ella como Gigena se encuentran procesados en una causa judicial por presunto peculado en el uso de fondos nacionales destinados a viviendas, que nunca se habrían construido.
En la localidad hay un total de 1.390 electores.
Villa Calmayo
Tres fuerzas se enfrentan el domingo en la pequeña comuna de Calmayo, ubicada entre Santa Rosa de Calamuchita y San Agustín, y que tiene 178 electores.
Luis Camandone es jefe comunal desde hace más de 20 años y espera lograr continuidad en su gestión con su hijio, Yamil Mengo, postulante de Hacemos Unidos por Córdoba.
La oposición llega dividida: Víctor Delgado es candidato del PRO y María Julieta Astrada, de Somos Calmayo, que nuclea a radicales y juecistas.
