El Sindicato Unión de Obreros y Empleados Municipales (Suoem) de la ciudad de Córdoba rechazó este martes “en forma categórica y unánime” la última propuesta salarial elevada por el departamento Ejecutivo Municipal, en una presentación formal realizada ante la Secretaría de Trabajo de la Provincia el 10 de junio.
Además, anunció que se sienten en “libertad de acción” para volver a las protestas, y por eso anunciaron que el miércoles vuelven las “acciones sorpresivas”, con asambleas de 2 horas por turno y quite de colaboración en la Municipalidad y sus dependencias.
Horas después, desde la administración de Daniel Passerini le dijeron al gremio que recién se van a “sentar a conversar después del pago del medio aguinaldo”.
El Suoem
En un escrito firmado por su secretario general, Rubén Daniele, el gremio denunció que el documento del Ejecutivo “se aparta gravemente de la verdad de los hechos” y representa una “provocación” a los trabajadores municipales.
En el texto, el Suem acusa al gobierno municipal de sostener un discurso de prudencia fiscal que considera falso, ya que —según detallan— el propio Ejecutivo habría incrementado la planta política, multiplicado los alquileres de edificios públicos, duplicado contrataciones, y favorecido a empresas privadas con contrataciones superpuestas.
“El modelo de administración ha profundizado el gasto improductivo”, advierten, y citan como ejemplo la creación del Ente de Fiscalización y Control.
Uno de los puntos más críticos es el rechazo al congelamiento salarial. El sindicato denuncia una pérdida del 20% del poder adquisitivo y cuestiona que la única recomposición otorgada en el año, del 9%, fue insuficiente y tardía, ya que sólo cubrió parcialmente la inflación de 2024.
Para el Suoem, el Ejecutivo está avanzando hacia una “rebaja salarial permanente”, al vincular cualquier actualización salarial a condicionamientos fiscales sin garantizar paritarias ni mecanismos automáticos de ajuste por inflación.
El comunicado también refuta que haya voluntad de diálogo real por parte del municipio. Según el gremio, durante los 40 días de plan de lucha no fueron convocados a ninguna reunión, pese a los reiterados pedidos formales.
“La ruptura no es fruto de intransigencia, sino de la falta de voluntad política del Ejecutivo”, afirman.
Además, rechazan con fuerza las acusaciones de violencia por parte del gremio. “Si de violencia se trata, hay que nombrarla: es la precarización escandalosa, los traslados compulsivos, la quita del salario real y los discursos que enfrentan a la ciudadanía con los trabajadores municipales”, sostienen.
También denuncian la negativa a discutir condiciones de los sectores más vulnerables, como monotributistas y becarios.
Finalmente, el Suoem comunicó que se considera “en libertad de acción” desde el 10 de junio para continuar con las medidas gremiales que considere necesarias.
La responsabilidad del agravamiento del conflicto, remarcaron, recae exclusivamente en el Ejecutivo, al que acusan de optar por “la confrontación, la mentira y el ajuste” como método de gestión.
La Municipalidad
“Todos sabemos que la realidad de los municipios es compleja en función del aumento de la demanda social y de servicios; y que los ingresos han venido cayendo, sobre todo los vinculados a la actividad económica. Es la decisión del intendente Passerini de mantener el equilibrio de las cuentas públicas y priorizar los servicios y obras para los vecinos”, dijo Sergio Lorenzatti, el secretario de Administración Pública de la Municipalidad.
Y además, afirmó: “La situación económica del Municipio nos exige mayor responsabilidad en relación a un gasto eficiente e inteligente. Los trabajadores municipales tienen un salario superior al promedio en la Argentina de hoy y ya han percibido en lo que va del año un 9%”.
Por todo lo expresado, le dijo al Suoem que no habrá más negociaciones hasta después de junio.
“En función de eso, consideramos que corresponde sentarnos a conversar después del pago del medio aguinaldo”, cerró.
