Mientras se demora el cierre del salvataje financiero que otorgará el gobierno de los Estados Unidos, el Tesoro Nacional tuvo que sacrificar otros U$S 400 millones para mantener a raya la cotización del dólar y pese a ello tuvo que convalidar una leve suba de la paridad.
Así, desde el miércoles pasado lleva cedidos cerca de U$S 1.400 millones, de los U$S 2.200 que había conseguido por la liquidación extraordinaria del sector agropecuario.
En la apertura de las negociaciones, el Tesoro Nacional marcó un nuevo techo dentro de la banda de flotación con posturas a un precio de $ 1.430, $ 5 por encima de lo que venía operando en las ruedas previas. El volumen total operado fue de U$S 652 millones, con oferta predominante de entidades oficiales, según interpretaron operadores de mercado.
Con la misma sintonía, el Banco Nación también dejó correr la cotización oficial que de esta forma pasó a $ 1.415/1.455. En las ventanillas de los bancos para los minoristas los precios quedaron en $ 1.410/1.460. El “blue” paso a $ 1.430/1.450; en Córdoba $ 1.465.
En tanto, los financieros descendieron. El MEP se ubicó en $ 1.496 y el Contado con Liquidación en $ 1.520, con lo cual las brechas se comprimieron a 2,7 y 4,5%, respectivamente.
En los mercados de futuros, el dólar a fin de octubre se pactó a $ 1.467, también con ventas oficiales para reducir su precio.
Primer encuentro
Mientras tanto, el ministro de Economía, Luis Caputo, con parte de su equipo económico, inició en Washington las conversaciones con el secretario del Tesoro de los Estados Unidos, Scott Bessent.
El funcionario americano publicó una nota en redes sociales dándole la bienvenida a la delegación nacional.
“Me complace dar la bienvenida a Luis Caputo y a la delegación argentina al Tesoro de los Estados Unidos. Durante su estadía aquí en Washington, continuaremos nuestras productivas discusiones sobre las diversas opciones que el Tesoro tiene preparadas para apoyar las fuertes políticas de Argentina”, señaló Bessent.
En otro orden, JP Morgan decidió quitar a la Argentina de su indicador Emerging Markets Bond Index Plus (EMBI+), que agrupa a los bonos de los países soberanos y que es la base para la conformación del índice “Riesgo País”. Los títulos de la Argentina fueron trasladados al EMBI Global Diversified (EMBIGD), un indicador de menor relevancia.
La implicancia directa es que el indicador “Riesgo País” ya no se actualizará en tiempo real (o sean con la continúa cotización de los bonos) sino que se hará en forma diaria. Cabe recordar que el “Riesgo País” es la sobretasa que debe pagar un país por sobre la que pagan los bonos del Tesoro de los Estados Unidos y depende de la cotización de los títulos soberanos.
La última actualización ubicó el Riesgo País en 1.086 puntos. Tantos los acuerdos con el FMI como el que se tramita con Donald Trump tienen como objetivo que baja a la zona de 400/500 puntos para que Argentina pueda volver a los mercados de deuda a refinanciar abultados vencimientos de capital que sobrevienen en 2026. Con una tasa de bonos estadounidenses de 4,25%, con un Riesgo País de 500 puntos, Argentina debiera pagar una tasa de 9,25% anual para colocar deuda.