“A pintar de violeta todo el país”, arengó Javier Milei la noche en que La Libertad Avanza venció al PRO en la Ciudad de Buenos Aires por el doble de votos. El contundente triunfo sobre el macrismo en su propio bastión envalentonó al partido de gobierno con miras a llenar las listas de libertarios puros, acrecentar su tropa legislativa y pasar a la ofensiva en el Congreso. Sin embargo, el horizonte que asoma después del 10 de diciembre no es del todo tranquilizador para el presidente.
En los comicios del 26 de octubre, La Libertad Avanza debutará como sello nacional y, en cualquier escenario, es el espacio que más promete crecer: en la Cámara de Diputados arriesga poco, y en el Senado, nada. Aun así, la bancada oficialista no tendrá quórum propio; seguirá obligada a negociar con otras fuerzas para sancionar leyes; y, si no formaliza una alianza con el PRO, también estará lejos del tercio necesario para blindar vetos presidenciales.
En Diputados, el bloque dirigido por Gabriel Bornoroni tiene 39 representantes y en estas elecciones solo pone en juego ocho bancas: las de José Luis Espert, Carolina Píparo (Buenos Aires), María Fernanda Araujo, Nicolás Emma (CABA), Álvaro Martínez (Mendoza), Alberto Arancibia Rodríguez (San Luis), Florencia Klipauka Lewtak (Misiones) y Carlos Zapata (Salta).
Un estudio del politólogo Pablo Salinas tomó como base la elección de 2023 (en la que La Libertad Avanza compitió por primera vez a nivel nacional con ayuda de sellos aliados) y proyectó tres escenarios según los resultados que hubo en las PASO, en las generales (mapa de tercios) y en el balotaje en el que resultó ganador Milei (polarización total). Las conclusiones diluyen, en buena medida, el sueño violeta.
Con los votos obtenidos por Milei en la segunda vuelta (un escenario extremo y poco probable) La Libertad Avanza aumentaría de 39 a 94 bancas. Pero si se toma en cuenta el resultado de las PASO y de las generales, ascendería a 75 o 71, respectivamente. Es decir, sumaría entre 36 y 32 bancas más. En este caso, los libertarios seguirían por debajo de Unión por la Patria, que según las proyecciones de Salinas se mantendría como primera minoría con un piso de 89 bancas totales (hoy tiene 98).
En este supuesto, La Libertad Avanza tendría una oportunidad de superar al kirchnerismo y ser la bancada más numerosa. ¿Cómo? A través de un interbloque con el PRO, que podría totalizar, de mínima, entre 100 y 116 bancas. Este número no solo le permitiría al Gobierno convertirse en primera minoría, sino también asegurarse con comodidad el tercio necesario para sostener vetos contra leyes que atenten contra el plan fiscal. Pero igual sería insuficiente para el quórum, que es con 129 presentes.
“Aún con una elección arrasadora (lo que muestra el escenario balotaje, desde ya muy poco probable) el Gobierno sigue obligado a negociar para aprobar y/o bloquear leyes”, concluyó el autor del informe, quien también avizoró que “varios gobernadores intentarán formar alianzas con LLA para intentar tener más legisladores que les respondan y de esta manera mantener y/o incrementar su capacidad de negociación con el poder central”.
Senado
En el Senado se renuevan bancas de ocho distritos: Ciudad de Buenos Aires, Chaco, Entre Ríos, Neuquén, Río Negro, Salta, Santiago del Estero y Tierra del Fuego. Por cada uno se eligen tres representantes, de los cuales dos son para el partido o alianza que resulte primero, y uno para el segundo.
De los 24 lugares en juego, el que más arriesga es Unión por la Patria (15). Le siguen la UCR (4), el PRO (2) y fuerzas provinciales (3). Para los libertarios, liderados por el jujeño Ezequiel Atauche, será todo ganancia: como desembarcaron allí por primera vez en 2023 y no arriesgan ninguna banca, solo pueden crecer. Hoy tienen apenas seis integrantes sobre 72.
De acuerdo con el informe de Salinas, el oficialismo aumentaría a 15, 14 o hasta 20 senadores si se toman los resultados de las PASO, generales y balotaje de 2023. Indudablemente, el escenario es mejor al actual, aunque no tendrán quórum propio (37) ni un tercio de la Cámara (24) por sí solos.
Por otra parte, una encuesta de CB Consultora predijo que La Libertad Avanza podría ganar en siete de los ocho distritos donde se eligen senadores, bajo un esquema de alianzas con el PRO (en CABA y Entre Ríos) y con la UCR (en Chaco). Con estas victorias, La Libertad Avanza sumaría 14 miembros y llegaría a 20, aunque no todos serían puros, producto de los eventuales acuerdos con aliados.
La única provincia donde los violetas saldrían segundos, según este sondeo, es Santiago del Estero, donde ganaría cómodo el oficialista Frente Cívico, al mando del gobernador peronista Gerardo Zamora, aliado circunstancial de Milei.