Pese a que desde hace varias semanas se dan por hecho los nombres de unos 15 futuros ministros provinciales, el gobernador electo Martín Llaryora puso este jueves en revisión ese esquema que se venía trabajando y ordenó una drástica disminución de ministerios.
Desde el entorno de Llaryora se informó que la medida se adopta en línea con el esquema ministerial que está planteando el presidente electo, Javier Milei.
En línea con Milei: los cambios que aplicará Llaryora en el Gabinete de Córdoba
Ese futuro gabinete nacional tendrá ocho ministerios. “Es muy probable que avancemos a un esquema similar, porque además de la necesaria reducción de gastos, hay una coordinación necesaria con la Nación que se facilita con una estructura parecida”, explicaron.
En la actualidad la Provincia tiene 17 ministerios y nueve agencias, a la que acaba de sumarse una más: Agro Córdoba. Ese número será inferior a partir del 10 de diciembre, cuando varios de esos ministerios se transformarán en secretarías.
El esquema de agencias también ingresa en revisión. Llaryora pretende mantener el sistema de trabajo público-privado que facilitan esos organismos, aunque algunas de ellas también podrían transformarse en secretarías.
En el entorno de Llaryora intentan que el cambio no desarticule el equipo que había comenzado a conformarse. En principio, muchos de quienes habían aceptado ser ministros, deben confirmar ahora si aceptarán ser secretarios.
Los anuncios de Milei
Llaryora adoptó esa decisión en vistas de los anuncios iniciales de Milei, que anticipa un achique drástico del gasto público, la paralización de obras públicas, el recorte de todos los giros no automáticos a las provincia y un ajuste general que anticipa una recesión mayúscula.
“Las cuentas de la Provincia ya están muy afectadas por las medidas de los últimos meses de Sergio Massa”, explicaron.
El equipo económico que coordina el traspaso provincial está alarmado por el agravamiento de la situación en las últimas semanas, en que se combina la reducción de ingresos propios, la caída de los envíos de coparticipación por la reducción de Ganancias e IVA y la falta de actualización de los envíos de la Anses a la Caja de Jubilaciones.
“El plan platita de Massa lo están pagando las provincias, y cuando a ese recorte se le suma el bache de Caja, son casi 12 mil millones de pesos por mes que le están faltando a los ingresos provinciales por recortes de la Nación”, reclaman en simultáneo desde el Panal y el Palacio 6 de Julio.
