Por un decreto firmado por el gobernador Martín Llaryora, la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) se convertirá en una sociedad anónima unipersonal (SAU) con el 100% de su capital accionario en manos del Estado.
La nueva figura legal, le permitirá entre otras cosas ofrecer nuevos servicios como Internet en todos sus alcances, acceder a crédito en el mercado financiero en forma directa, o inclusive, presentarse en licitaciones para operar otros sistemas energéticos en generación, transporte y distribución.
La gama de alternativas es extensa pero, sobre todo, el cambio la adecúa a las exigencias del artículo 48 del decreto de necesidad y urgencia 70 del gobierno de Javier Milei que obliga a todas las empresas públicas a transformarse para continuar en funcionamiento.
Con el cambio, Epec pasará a denominarse “Empresa Provincial de Energía de Córdoba SAU”, dando conformidad también a lo establecido en el artículo 33 de la Ley Nacional N° 11.015, explicó el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Fabián López, quien acompañó a Llaryora en el anuncio.
“Epec es una de las empresas de energía eléctrica más importantes y relevantes de la Argentina. Está saneada, auditada, con los balances al día, sin deudas con el sistema de distribución mayorista, y la única empresa del país que desarrolla el sistema de medidores inteligentes”, explicó López a La Voz.
El funcionario consideró que a partir de este nuevo estatus jurídico, la empresa “podrá tener un rol protagónico más allá del sector eléctrico, en áreas como tecnificación del agro, energías alternativas y renovables”, entre otras.
López subrayó que los cambios no modifican el nada el vínculo con los trabajadores de la empresa y descartó cuál intención de privatizar o desprenderse de capital. “No hay ninguna chance de privatizar nada”, recalcó el funcionario.
Por el contrario, explicó que la transformación “implica un nuevo ropaje jurídico en una sociedad anónima unipersonal con un único dueño que es el gobierno de Córdoba que posee el 100% por ciento de las acciones”.
En el mismo acto, Llaryora dispuso la disolución de la Agencia de Conectividad y pasarle los 6.000 kilómetros de fibra óptima tendidos junto con los gasoductos troncales a Epec. El proyecto incluye prestar los servicios de internet en transporte, “caché” y última milla.
“Queremos que este proceso de transformación signifique una mejora en los servicios de la empresa con más tecnología e innovación, haciéndola más eficiente, con la posibilidad de acceder a mercados de financiamiento que hoy están vedados por ser parte del mercado público no financiero”, agregó.
Mirar más cosas
En el Gobierno explican que el nuevo formato jurídico posibilitará encarar nuevas áreas de negocios en el sector energético y tecnológico que son rentables.
Por ejemplo, Epec podría presentarse en cualquier licitación para operar sistemas eléctricos fuera de Córdoba, como por ejemplo, centrales hidráulicas, donde cuenta con un experimentado conocimiento.
O también, convertirse en una nueva actora del negocio del transporte en alta tensión. Su personal muestra expertise, asimismo, en las energías renovables fotovoltaicas y de hecho está negociando desarrollos con el sector privado.
En el asesoramiento aparece una veta potencial: el desarrollo de sistemas de medición inteligente para otras distribuidoras del país. En este campo, Epec trabaja con compañías internacionales que le permitieron tener en funcionamiento el sistema en algunos sectores de Córdoba, con la intención de extenderlo.