El Gobierno nacional formalizó este martes la desregulación casi plena del mercado yerbatero al quitarle al Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym) su facultad de intervenir y fijar precios en el sector.
Esta decisión, plasmada en el Decreto 812/2025 publicado en el Boletín Oficial, elimina de manera definitiva la capacidad del organismo para establecer valores de referencia para la materia prima que se les paga a los productores.
El decreto, que lleva la firma del Presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Manuel Adorni y el ministro de Economía Luis Caputo, reescribe gran parte del Decreto 1240/02 que reglamenta las funciones del Inym.
Gobierno desregulo el mercado de yerba mate
La nueva normativa especifica que “El Inym no podrá dictar normas o establecer intervenciones que provoquen distorsiones en los precios de mercado, generen barreras de entrada, impidan la libre iniciativa privada y/o interfieran en la libre interacción de la oferta y la demanda en la producción y comercialización de la yerba mate y derivados”.
Según explicaron desde la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, la medida se alinea con los cambios introducidos por el Decreto N° 70/2023 y el artículo 42 de la Constitución Nacional. El objetivo es la “derogación de normas que resultan contrarias a la defensa de la competencia y la desregulación promovida por el Gobierno nacional”.
Las modificaciones buscan que el Inym “focalice sus actividades en las verificaciones de calidad, al tiempo de impedir su intromisión en un mercado competitivo”.
Las modificaciones se estructuran sobre tres ejes principales: la derogación de las facultades de intervención sobre la actividad económica, la prohibición de distorsionar los valores del mercado, y la adecuación a la normativa.
El decreto también instruye al organismo nacional para que, en un plazo máximo de 30 días, adecúe toda normativa interna que contradiga lo establecido en el presente instrumento. Además, se derogaron específicamente los artículos 9°, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18 y 19 del Decreto N° 1240 del 12 de julio de 2002. Cabe recordar que el Inym ya no fijaba valores de referencia desde finales de 2023.
El impacto en el sector yerbatero
La decisión de eliminar las facultades del Inym en el establecimiento de valores de referencia ya generaba impacto en la actividad. Según un informe de Coninagro citado por Clarín, el sector yerbatero atraviesa una situación de crisis que se arrastra desde hace más de un año.
En lo referente a precios, el informe indicó que en octubre la tonelada de hoja verde se pagó al productor alrededor de $ 280.000 (280 por kilo). Este valor representa una caída del 3% mensual, aunque una suba interanual del 33% respecto a los $ 210.000 de un año atrás.
Es relevante señalar que, durante 2023 y parte de 2024, el valor del kilo de yerba al productor se pagaba en torno a los $ 400.
Mientras los productores enfrentan esta coyuntura, la industria yerbatera y los molinos celebran el incremento del consumo interno y el alza en los embarques con destino a mercados externos.
En cuanto a las exportaciones, en septiembre se registraron 7.255.770 kilos salidos de la zona productora, una cifra nunca antes alcanzada. Las proyecciones indican que el año cerrará con más de 50 millones de kilos exportados, implicando un salto de más del 20 por ciento.
Respecto al mercado interno, los despachos de los molinos saltaron de 193.430.827 kilos a 207.103.486 kilos, lo que significa que los argentinos consumieron 13.672.659 kilos más que en el período enero-septiembre de 2024.
Esta medida consolida el marco de libre competencia impulsado por el Poder Ejecutivo, obligando al sector yerbatero a adaptarse a un esquema de precios definidos exclusivamente por la oferta y la demanda, mientras el Inym se concentra únicamente en la verificación de la calidad.
























