Guillermo Moreno, exsecretario de Comercio del kirchnerismo, cree que el gobierno de Javier Milei no completará su mandato. En el streaming La Voz en Vivo, el dirigente peronista apuntó contra el rumbo económico, calificó la gestión actual como “un desastre” y advirtió que la situación es “muchísimo peor que en 2001”.
También habló sobre la reconfiguración del peronismo, el rol de Juan Schiaretti y la irrupción de Martín Llaryora como figura nacional.
“El peronismo se está uniendo ante esta situación dramática que está viviendo la patria”, sostuvo Moreno. Según dijo, el movimiento busca definir su plan de gobierno para “volver a hacerse cargo del Ejecutivo Nacional, que esperemos que sea pronto”.
Para Moreno, el futuro inmediato del gobierno libertario está en cuestión. Cuando se le preguntó si creía que Milei completará su mandato, respondió con una analogía provocadora.“Si usted me dice que en Córdoba las empresas están bárbaras, que la metalmecánica, el campo, el turismo y el comercio van extraordinarios, entonces le diría que no hay inconveniente en que siga. Pero si en el sistema capitalista las empresas no son rentables, no tiene ningún sentido. ¿Para qué quiere usted que termine?”, planteó.
Moreno insistió en que el deterioro productivo es evidente. “La realidad es que este gobierno es un desastre. Vamos camino a que 70% de los autos que se vendan sean importados, cuando históricamente el mercado interno y las exportaciones se repartían en partes iguales. ¿Cuántas empresas más se tienen que fundir para que empecemos a hablar de lo que hay que hablar?”, se preguntó.
Según su visión, la crisis es estructural y no se resuelve con encuestas ni indicadores de confianza. “La política está para evitar que esto se desborde, pero no veo conducción ni comprensión del problema. Mientras tanto, algunos prefieren simular demencia y hacerse los que no entienden. Para alguien que no está en sus cabales ya está el Presidente”, cuestionó.
Moreno expresó que cree que interrumpir el mandato de Milei puede ser la respuesta. “Pero siempre tiene que ser dentro de la ley. No hay que desbordar. Por eso, antes de un desastre, adelantar las elecciones sería una solución”, afirmó.
Cuando se le señaló que los procesos de adelanto electoral en Argentina han sido caóticos, Moreno redobló la apuesta: “Esto es mucho peor que el 2001. Si usted me dice que el final de esto va a ser como el 2001, yo se lo firmo ahora. El problema es que esto es muchísimo peor. Pregúntele a Arcor cómo está hoy comparado con ese momento. Si las grandes empresas no tienen stock ni capacidad para abastecer el país, ¿cómo vamos a sobrevivir?”.
El peronismo como alternativa
Moreno está convencido de que el peronismo recuperará el poder. “Estamos resolviendo cuál será nuestro plan de gobierno. El mundo va hacia el peronismo, aunque no lo reconozcan. En la ‘década ganada’ hacíamos lo que hoy hace la única superpotencia que queda: Estados Unidos. Éramos el pasado, pero resulta que éramos el futuro”, aseguró.
No obstante, admitió que el movimiento necesita presentar propuestas claras para los sectores desencantados con la política.
“Si alguien quiere ofrecer una nueva propuesta, la quiero escuchar. Pero decir que Milei está en su apogeo cuando saca apenas el 30% en la Ciudad de Buenos Aires, después de un año y medio, es un disparate. Macri sacaba más del 50% en la Capital”, sostuvo ante la referencia de la buena posición que el Presidente registra, por ejemplo, en el Índice de Confianza de la Universidad Di Tella.

En ese sentido, para Moreno las elecciones provinciales recientes son la verdadera señal de la debilidad libertaria.
Ante la aclaración de que las votaciones habían sido distritales y que no se había votado a Milei, el dirigente peronista relativizó la situación.
“En el Chaco, el peronismo sacó ocho diputados, los radicales seis y La Libertad Avanza apenas dos. En Salta no ganó Milei. En Jujuy tampoco. En Santa Fe, menos. Entonces, ¿de qué auge me hablan? No entiendo por qué se habla de encuestas en vez de hablar de lo que ya pasó en las urnas”, expresó.
Schiaretti y el “peronismo cordobés”
El exsecretario de Comercio también analizó el rol de Juan Schiaretti en el escenario político y el futuro del peronismo cordobés en el nuevo armado nacional.
“Tengo el mayor de los respetos por Schiaretti, igual que por el gobernador Llaryora. Pero no sé a qué llaman ‘peronismo cordobés’. ¿Acaso tiene otras 20 verdades? El peronismo no es una cáscara que se llena con cualquier cosa”, afirmó.
Según Moreno, el lema de Schiaretti de “tanto mercado como sea necesario, tanto Estado como haga falta” no es peronismo, sino socialdemocracia.
“Eso es viejísimo, de antes de la caída del muro de Berlín. No tiene nada que ver con el peronismo. El peronismo no es el ‘Estado presente’. El peronismo es un gobierno esclavo de un pueblo libre. Si son socialdemócratas, que lo digan, pero eso no es peronismo”, lanzó.
De todas maneras, Moreno elogió la decisión del gobernador Martín Llaryora de aumentar las jubilaciones mínimas en Córdoba, en contraposición al ajuste nacional, aunque con un dato erróneo sobre el alcance de la medida (dijo que beneficaba a más de 100.000 personas, cuando son 56.000)
“Con una medida, Llaryora se transformó en un dirigente nacional. Imagínese el desastre del Gobierno Nacional, que con una decisión que afecta a una cancha de fútbol llena, un gobernador se convierte en líder nacional. Eso muestra la orfandad de conducción que tenemos”, anticipó.
Además, subrayó que el gesto de Llaryora lo posiciona en la política nacional. “Cuando vimos la noticia en la televisión, todos dijimos: este muchacho copó toda la parada. Simplemente, diciéndole a Milei que es una bestia por negarles un 7% a los jubilados y otorgando un aumento mucho mayor, se ganó un lugar en la discusión de poder”.
Críticas al relato oficial
Moreno cuestionó la narrativa del gobierno de Milei, que se presenta como exitoso pese a los indicadores sociales y productivos. “Los libertarios dicen que están bajando la inflación, pero no hablan de la inflación en dólares, que fue récord mundial el año pasado. No hay país que haya tenido una inflación en dólares como la que tuvimos nosotros. ¿De qué están hablando?”.
También apuntó contra la falta de un tipo de cambio competitivo para las empresas. “Pregúntenle a los dueños de las fábricas cuánto necesitan para seguir ganando plata. Pero háganlo en serio, no con eufemismos. Recién entonces podremos empezar a ordenar el futuro”.
Advertido sobre lo delicado de proponer un final anticipado del Gobierno, Moreno cerró la entrevista con una advertencia contundente sobre el futuro inmediato: “Esto no aguanta. Es mucho peor que en 2001″.
Y cerró diciendo que “no hay margen para seguir simulando que todo está bien”.
“Si el gobierno no puede garantizar la rentabilidad de las empresas y el bienestar básico de la gente, se va antes. Y nosotros, el peronismo, vamos a estar listos para hacernos cargo”, sintetizó.