Córdoba entra de lleno por estos días a la época de mayor riesgo de incendios, que se acrecentará entre agosto y septiembre, cuando suelen darse los más graves por la agudización de las condiciones climáticas.
No es poca cosa, en una región que es calificada entre las 10 del mundo con mayor incidencia de incendios forestales agudos, por la combinación de su tipo de vegetación con su condiciones de clima.
Unas tres mil hectáreas se han reportado como quemadas hasta ahora, en lo que va del año, según datos preliminares que manejan en el Plan Provincial de Manejo del Fuego.
Sólo en los últimos días se sumaron casi mil, con dos focos principales en Salsipuedes (Sierras Chicas) y Villa Valeria (sur provincial). En ambos, el saldo lamentable es que ardieron áreas con bosque nativo, un capital natural ya muy escaso en Córdoba.
“Comparado con los años anteriores podría decirse que a esta altura es un año normal, quizá hasta en baja, pero faltan los meses más críticos”, señaló Claudio Vignetta, secretario de Gestión del Riesgo de la Provincia.
Cuidado con los cables
El reciente incendio que durante dos días (sábado y domingo últimos) generó preocupación en torno a la localidad de Salsipuedes se habría iniciado por la caída de cables de energía, en un día de fuertes vientos. Eso señalan diversos testigos.
Un inicio similar se reportó en otro foco que inquietó días atrás en la zona de La Cumbre (Punilla).
El año pasado, dos de los incendios más grandes tuvieron como hipótesis principal la chispas producidas por las caídas de cables de energía.
En los últimos años aparece cada vez con mayor frecuencia la sospecha de ese origen, lo que implica también la necesidad de sumar mayor prevención en el control y el mantenimiento de esas redes.
Sobre el caso de Salsipuedes, Vignetta señaló a La Voz que “por ahora solo tenemos sospecha de un origen ligado a la caída de cables, pero sin certezas. Se está investigando para ver si se puede confirmar o no”.
Dos años de récords
Los dos últimos años fueron particularmente graves para Córdoba en materia de incendios. En 2020 se registró el récord de superficie afectada en los últimos 33 años, con unas 341 mil hectáreas afectadas.
En 2021, el área bajo fuego fue menor aunque igualmente alta: casi 66 mil hectáreas, según relevamientos oficiales. Pero se registraron otros dos récords: el mayor número de viviendas quemadas desde que se tenga memoria, y (junto al año 2003) la mayor cantidad de muertes adjudicables al fuego, con tres casos.
La superficie afectada por incendios de 2003 a 2021
Este 2022 será el primero en que se pondrá en prueba la tarea de los Equipos Técnicos de Acción ante Catástrofes (Etac), creados por la Provincia. Esa estructura nació con 350 empleados estables y ahora supera los 700, en cinco sedes ubicadas en las regiones de mayor riesgo de incendios.
“El rol de las Etac este año es el patrullaje en horarios críticos, sobre todo en zonas donde teníamos incendios reiterados, y ya vemos que eso permitió bajar los focos intencionales. Y se han coordinado con instituciones y sectores tareas de prevención y se está avanzando con la confección de los mapas de riesgos de incendios por zonas. También se coordinó el trabajo con los cuarteles de bomberos para afrontar las tareas de extinción”, señaló Vignetta.