El Gobierno provincial anunció una serie de beneficios fiscales para el sector industrial, entre los que se incluye la elevación del mínimo no imponible. Además, los comercios podrán diferir el pago del impuesto inmobiliario.
De acuerdo a lo informado por la Provincia, el gobernador Martín Llaryora acordó, en conjunto con la Unión Industrial de Córdoba, elevar el mínimo no imponible. De esta manera, aquellas empresas que hayan facturado menos de $ 2.513 millones quedarán exentas de pagar Ingresos Brutos.
Además, el mandatario decidió, junto a la Cámara de Comercio de Córdoba y la Unión Industrial de Córdoba, otorgar a las industrias el beneficio del diferimiento en el pago del impuesto inmobiliario urbano, tal y como se implementa en el sector agropecuario.
De acuerdo a lo indicado por la Provincia, el pago del impuesto inmobiliario urbano y de ingresos brutos significaron, junto al pago de sellos, un esfuerzo fiscal de $ 106 mil millones en 2024.
En cuanto a las medidas anunciadas, el Gobernador señaló que estas resoluciones son “parte de un modelo de gestión que sostiene el equilibrio entre la libre economía de mercado y la intervención estatal, que nos permite acompañar, en el ámbito fiscal, a sectores en crisis, afectados por factores climáticos, precios internacionales y las malditas retenciones”.
En esa línea, afirmó que Córdoba es “una de las provincias de menor presión fiscal”. “Tenemos una de la alícuota promedio de Ingresos Brutos más baja entre provincias comparables. Y somos la segunda provincia que más bajó la presión tributaria desde 2017 a la fecha”, añadió.