El nuevo Gobierno nacional consiguió este miércoles una victoria rápida al derrumbar de un golpe la brecha que existía entre el dólar oficial y el blue, no obstante lo cual el nuevo valor del tipo de cambio oficial -que aumentó el 104,74%-, acelera el traslado a precios de ese costo, con lo cual se disparará la inflación de diciembre y la de los meses siguientes.
El primer sector en reaccionar a la nueva realidad fue el petrolero, que este miércoles subió un 30% el valor de los combustibles, porcentual que se agrega a otro tanto producido la semana pasada. Pero también se registran incrementos sostenidos en alimentos y bebidas. El principal en esa canasta es la carne vacuna cuya ponderación en el índice de precios al consumidor (IPC) es muy significativa: 5%.
El propio Gobierno de Javier Milei admite que la inflación que se espera para el último mes de este difícil 2023 y en los primeros meses de 2024 es altísima. “Vamos a estar por unos meses peor que antes”, señaló el ministro de Economía, Luis Caputo.
¿Superará el 20% esa inflación mensual? Todavía no está claro. Una de las causas será, sin duda, el piso del que parte, la inercia inflacionaria que el país arrastra desde hace meses.
Los datos de noviembre del (IPC) publicados este miércoles por el Indec (12,8%) no hacen otra cosa que poner esto en evidencia.
El incremento del mes pasado no sólo fue la suba de precios mensual más alta del año, ni la más elevada de toda la gestión de Alberto Fernández, sino también la mayor en 32 años.
Al superar al 12,7% de septiembre pasado, el IPC de noviembre solo se ve superado por el 27% de febrero de 1991.
Las causas son muchas y variadas, pero evidentemente noviembre captó en gran medida la fenomenal emisión monetaria que el Banco Central inyectó en la economía argentina en los meses entre las elecciones primarias y el balotaje, y aunque hubo un breve “oasis” en octubre (8,3%), la tasa volvió a despegarse.
Hay que recordar que el entonces ministro de Economía y candidato del oficialismo, Sergio Massa, impulsó un combo de medidas para recuperar el poder de compra de los salarios, como la devolución del IVA, la quita de Ganancias y un conjunto de créditos personales que se advertía iba a recalentar aún más la economía.
El IPC de Córdoba ya había adelantado algo la semana pasada, cuando midió 12,9% para noviembre. En Caba, en tanto, según la Dirección General de Estadística y Censos de esa ciudad, los precios subieron en el territorio porteño un 11,9% el mes pasado.
Desde el Centro de Almaceneros de Córdoba, por su parte, informaron que la inflación de noviembre fue del 14,6% y el relevamiento que mes a mes realiza La Voz entre las principales cadenas minoristas de la ciudad de Córdoba midió 15,7%.
Medida de forma interanual, la inflación acumula en los últimos 12 meses (noviembre contra noviembre) un incremento del 160,9%, la “velocidad” en el aumento de los precios más notable desde julio de 1991, cuando el IPC marcaba 178,3% a la salida de la hiperinflación.
En lo que va del año, en tanto, el costo de vida aumentó un promedio de 148,2%, por lo que, dependiendo del dato de diciembre, a fin de año podría superar todo registro próximo en el tiempo.
En efecto, si el IPC del mes en curso (es decir, diciembre) marca 21%, el índice anual de 2023 será del 200%.
Combustible para llegar a ese nivel tiene de sobra dado que las naftas y el gasoil subieron la semana pasada entre 15% y 30% y este miércoles otro tercio, en el caso de Shell. Esa marca elevó el precio de la súper de $ 586 a $ 680. El gasoil común de $ 618 a $ 800. Los productos premium quedaron entre los $ 800 y los $ 960. YPF demoraba el incremento, pero se descuenta que seguirá el mismo camino.
Sin mercadería a la vista
Otra situación derivada de la devaluación pasó por la parálisis de numerosas actividades a la espera de tener los nuevos precios. En el sector de materiales de construcción directamente se paralizaron las ventas, algo que también incluyó a rubros afines como los insumos de acero y aluminio.
Un empresario cordobés resumió el panorama de la siguiente manera: “Las acerías, mantienen los presupuestos pero con el dólar a $ 800. 100% de aumento y vemos la entrega. Material Eléctrico: lo importado ídem que las acerías. Lo nacional sin definiciones. Accesorios (grifería) sin ventas ni listas de precio ni entregas hasta enero. Vidrios, sin definiciones. Aluar hace 20 días que no entrega aluminio”, detalló a La Voz.
La situación también tendría un alto impacto en las automotrices locales.
