A un mes del inicio del ciclo lectivo, la Provincia convocará la semana que viene a la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) para negociar la paritaria 2024. El objetivo de la administración de Martín Llaryora es que empiecen las clases con un acuerdo firme que para garantice la educación y el acceso de los alumnos al Paicor, cada vez más importante en el contexto de crisis social.
La UEPC, que se desmarcó de los gremios estatales y no acordó con la Provincia, protestó este jueves en la Unicameral, donde Llaryora dio su discurso de inicio del año legislativo. El gremio pidió una mesa de diálogo y la Provincia ayer confirmó que, aunque aún no han definido el día, se reunirán con el sindicato la próxima semana para acordar la paritaria 2024.
La instrucción del Gobierno provincial es que el diálogo con los sindicatos no se corte.
Aunque no hubo acuerdo con los docentes, Llaryora estableció por decreto que se les liquide el sueldo de enero con una suba del 14,6%, tal como todo el resto de los empleados estatales.
En la marcha del jueves, el secretario general del gremio, Roberto Cristalli, dijo: “Teníamos la esperanza de que el gobernador, que viene hablando en los medios de diálogo, de responsabilidad, de consenso, de sentido común, hubiese dicho una frase: convocamos a los docentes a discutir la paritaria del año pasado y la paritaria de 2024. No lo escuchamos hoy. Por lo tanto, más que nunca ratificamos por unanimidad todos los que estamos acá representando a la docencia de Córdoba, que queremos la mesa de diálogo, queremos que nos convoquen a discutir, queremos cerrar la paritaria de 2023″
Conducción UEPC
Días atrás, Llaryora pidió a los docentes “desideologizar” el reclamo. A diferencia de la UEPC conducida por Juan Monserrat, que era políticamente más homogénea, la cúpula actual cuenta en provincia con una conducción ligada al kirchnerismo, mientras que en la cuidad de Córdoba está liderada por la izquierda. Si bien hay diálogo y trabajo en conjunto entre los sectores, las negociaciones y acuerdos toman otro ritmo de resolución.
El desafío del gobierno con el gremio es deslindarse del laberinto interno del sindicato y lograr un acuerdo a tiempo, que beneficie a los docentes, y no que no interfiera en el inicio de las clases, estipulado para el 26 de febrero próximo.
La necesidad de que los alumnos vuelvan a las escuelas y reciban las raciones del Paicor es uno de los temas que el Gobierno toma como prioritarios. Durante las vacaciones, ese servicio se reemplaza por la entrega de módulos de mercadería para asistir la preparación de las comidas en los domicilios.
Según destaca la página de Gobierno, en el año 2023, el Paicor contó con alrededor de 330 mil beneficiarios registrados como titulares del servicio en 3.800 escuelas en toda la provincia.
