Lejos de los progresos que pregona el Gobierno Nacional, las jubilaciones continúan perdiendo poder adquisitivo ante el avance de la inflación y el congelamiento del bono adicional que reciben quienes perciben haberes mínimos.
El ministro de Economía, Luis Caputo, aseguró que en la actualidad la remuneración promedio de las jubilaciones es de $ 900.000, sin embargo informes del mismo gobierno contradicen sus dichos.
Un documento de la Secretaría de Trabajo publicado en su página oficial precisa que a junio el haber promedio de las jubilaciones se ubicó en $ 533.206, apenas un 60% de lo que manifestó el jefe del Palacio de Hacienda.
Este representa un incremento real (ajustado por inflación) de 1,6% en el año y de 2,2% con relación a junio del año pasado. En términos concretos, es el equivalente a una mejora de $ 9.000 en seis meses y $ 12.000 en un año. Para ejemplificar en bienes, este aumento representa que un jubilado puede comprar un kilo de carnes más (precio promedio) que un año atrás.
A esta situación, el gobierno la presenta como una “mejora” en los haberes jubilatorios.
Pero la cuenta es mucho más dramática cuando se analiza lo que sucedió con las jubilaciones mínimas, dado que el gobierno mantiene congelado el bono adicional en $ 70.000.
En el corriente mes de julio los jubilados de ese segmento recibirán de bolsillo $ 379.294, producto de un haber de $ 309.294 más el adicional de $ 70.000. Esto implica una pérdida real de poder adquisitivo de 8,4% con relación a lo que habían cobrado en julio de 2024. Si se compara con diciembre la pérdida se recorta a 1%.
En síntesis, cuando se analiza el panorama general de los haberes jubilatorios hay una pérdida de poder de compra para la enorme mayoría, mientras que apenas una porción minoritaria logró recomponer su bolsillo en una porción ínfima
Según las cifras oficiales, el total de jubilados en el país es de 7,2 millones, de los cuales 5,6 millones son jubilados y 1,6 millones son pensionados. De ese total, más de 4,3 millones accedieron por moratoria y cobra el haber mínimo y sufre por la decisión del gobierno de no ajustar por inflación el bono.
En un intento por explicar los motivos del recorte de haberes a los jubilados, Caputo aseguró que el ajuste recayó sobre aquellos que no completaron los aportes.
“Algunos nos dicen, ‘diferencien entre los que no aportaron y los que aportaron.’ Entonces para mí es importante aclarar que el 90% de los que cobran la mínima son los que no aportaron”, afirmó el ministro.
Al continuar con su razonamiento, Caputo aseguró que “el haber medio de los que aportaron es casi el triple, $ 900.000” y añadió que como “muchos además cobran pensión terminan cobrando por encima de $ 1 millón”.
En forma confusa, Caputo agregó “no hemos ajustado sobre unos u otros, hemos ajustado a todos por igual lo único que quedó sin ajustar es bono que el bono”.