La Corte Suprema de Justicia de la Nación emitió este martes una resolución clave que cierra una década de proceso judicial: dejó firme la condena de cuatro años de prisión impuesta al exministro de Planificación Federal, Julio De Vido, por su responsabilidad en la trágica colisión ferroviaria de Once, ocurrida en febrero de 2012.
Esta decisión implica que la pena impuesta al exfuncionario kirchnerista ya puede ejecutarse, por lo que se habilita su detención. Cabe recordar que De Vido nunca fue privado de su libertad en el marco de este expediente judicial.
El exfuncionario kirchnerista deberá presentarse en los tribunales federales de Comodoro Py este mismo jueves a las 10 para que se haga efectiva su reclusión, cuyas condiciones específicas aún se desconocen. La orden de detención fue firmada este martes por la tarde por el juez del TOF N° 4 Ricardo Basílico. Ahora se espera que la defensa pida que De Vido acceda a un régimen de prisión domiciliaria, ya que tiene más de 75 años.
Los argumentos de la Corte
Los jueces del máximo tribunal, Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti, resolvieron rechazar por inadmisibles tanto los recursos presentados por la defensa de De Vido, que buscaba su absolución, como los recursos de la Fiscalía, que pretendía un aumento de la condena.
De esta manera, la sentencia quedó consolidada y en condiciones de ser cumplida.
La tragedia de Once, que involucró un tren de la línea Sarmiento el 22 de febrero de 2012, dejó un saldo devastador de 52 personas fallecidas y 789 heridas.
El ex ministro fue condenado por el delito de administración fraudulenta, tras probarse que no cumplió con sus deberes de controlar el destino de los fondos públicos asignados a Trenes de Buenos Aires (TBA).

De Vido fue absuelto, sin embargo, por la figura de estrago culposo.
Tras la confirmación de la Corte Suprema, el proceso vuelve ahora al Tribunal Oral Federal 4 (TOF 4), que fue el encargado de llevar adelante el juicio y quien debe tomar la decisión de ordenar su detención.
No obstante, debido a su edad, 75 años, el ex funcionario podría acceder al beneficio del arresto domiciliario.
La confirmación de la condena pone fin al derrotero judicial del exministro, que incluyó intentos recientes por declarar la causa prescripta (vencida), un planteo que había sido desestimado el mes pasado por la Cámara Federal de Casación Penal y previamente por el propio TOF N° 4.
Esta resolución representa un paso definitivo en la historia judicial argentina, consolidando la responsabilidad penal de altos funcionarios por la tragedia que marcó al país.
El primer juicio por el caso, en 2015, ya había condenado al maquinista, a los propietarios y ex directivos de TBA, y a los ex secretarios de Transporte, Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi.























