El gobierno de Javier Milei decidió cerrar la agencia de noticias Télam. Durante la noche del domingo se vallaron los dos edificios de la agencia estatal y sus trabajadores se expresaron en redes contra la decisión del gobierno libertario.
Ya el vocero presidencial Manuel Adorni había tuiteado irónicamente: “Saluden a Télam que se va”.
En redes sociales repudiaron la actitud de Milei de cerrar la agencia de noticias, una de las más grandes de latinoamérica. En su discurso en el Congreso, Milei argumentó que Télam “ha sido utilizada durante las últimas décadas como agencia de propaganda kirchnerista”.
El último cable que publicó la agencia Télam
La policía valló los edificios de Télam, donde se realizará hoy un abrazo simbólico contra su cierre
La policía porteña valló esta medianoche los dos edificios de Télam en la Ciudad de Buenos Aires, donde este mediodía se realizará un abrazo simbólico en defensa de la agencia de noticias, cuyo cierre fue anunciado el viernes por el presidente Javier Milei.
La acción policial fue presenciada por trabajadores de la agencia que aún cumplían tareas en el horario de cierre de la edición de este domingo, y minutos después fue denunciada por la Comisión Gremial Interna y el Sipreba.
“El Gobierno nacional está llevando adelante uno de los peores ataques a la libertad de expresión en los últimos 40 años de democracia. Esta noche, policía de la ciudad valló los dos edificios de la Agencia Nacional de noticias y publicidad Télam, para evitar el masivo abrazo e impedir el acceso al edificio” de los trabajadores, denunció el gremio, en un comunicado, difundido por X.
Ante la colocación de las vallas que impide el acceso a los edificios de las calles Bolívar y Belgrano del centro porteño, los dirigentes del Sipreba se presentaron en estas dos sedes “para garantizar el resguardo del patrimonio público”, indicó el gremio.
El abrazo simbólico a los edificios, previsto para las 12.30, y del que participarán trabajadores de la agencia, dirigentes de varios gremios y de la CGT y las dos CTA, entre otros, fue convocado tras el anuncio del presidente de cierre de la agencia durante su discurso de apertura de sesiones extraordinarias ante la Asamblea Legislativa el viernes pasado.
Milei argumentó que Télam “ha sido utilizada durante las últimas décadas como agencia de propaganda kirchnerista”, el mismo justificativo que utilizó el exsecretario de Medios Públicos, Hernán Lombardi, cuando en 2018 se ordenaron 357 despidos en la agencia, muchos de ellos revertidos luego por la Justicia.
El anuncio de cierre de Télam fue reportado en tiempo real por los periodistas de la agencia que realizaban la cobertura de la apertura de sesiones.
“Los periodistas de la agencia demostraron el mismo viernes en la cobertura de la cadena nacional su profesionalismo”, resaltó, al respecto, el Sipreba.
Tras el anuncio presidencial, referentes de la cultura, de derechos humanos y del ámbito político, sindical, periodístico y de diversos organismos de la sociedad civil manifestaron su rechazo al cierre de la agencia, se solidarizaron con sus trabajadores y resaltaron “su trayectoria y profesionalismo” desde su fundación en 1945.
La historia de Télam
Télam nació bajo el nombre de Telenoticiosa Americana el 14 de abril de 1945 a instancia del entonces secretario de Trabajo y Previsión, Juan Domingo Perón, con el objeto de hacer frente “a la hegemonía informativa” de las agencias estadounidenses United Press International y Associated Press.
La agencia no fue por completo estatal en sus inicios, sino que comenzó como una compañía mixta de capitales privados y estatales. Su primer director fue Jerónimo Jutronich, quien se encargó de formar un equipo de periodistas, algunos de los cuales provenían del plantel de ANDI, otra agencia que creó el Estado argentino en 1944. En 1947 se dispuso la primera sede de la agencia en el primer piso del edificio de Esmeralda 433, Buenos Aires, sobre el Teatro Maipo.
La agencia Télam comenzó a emitir información el 12 de octubre de 1945, pero recién en 1948 pudo concretar la formación de una red de cobertura nacional al firmar los primeros contratos con periodistas del interior del país, quienes enviaban las notas a la redacción por telegrama o por teléfono.
La agencia sería en primer lugar intervenida tras el golpe de Estado de 1955 y el comienzo de la dictadura autodenominada “Libertadora”, y puesta bajo la órbita de la Fuerza Aérea. En consecuencia debieron exiliarse algunos de los periodistas más importantes de Télam, y si bien la dictadura intentó desmantelar la agencia ésta continúo funcionando, aunque con un número reducido de corresponsales.
La empresa comenzó a estabilizarse el 30 de julio de 1959, cuando Bernabé Villegas, Adolfo Garino y Blas Calaro, entre otros, produjeron un cambio jurídico en la agencia que pasó a ser Télam Sociedad Anónima, Periodística, Radiofónica, Cinematográfica, Comercial, Inmobiliaria y Financiera.
Un decreto del presidente de la Nación autorizó a la reciente empresa privada a funcionar bajo las nuevas condiciones. Durante los años 1960, Télam captó una amplia gama de clientes, incluyendo a los cuatro canales de televisión porteños y diarios de envergadura como el diario Clarín. La agencia comenzó a transmitir noticias por líneas de télex, hecho que permitió llegar a más puntos del país en menor tiempo.
El gobierno de facto de José María Guido clausuró la agencia el 30 de mayo de 1963 por considerar que “viene tramitando informaciones falsas y tendenciosas que por su naturaleza y alcance atentan contra el orden público y la tranquilidad de la población y siendo firme propósito del gobierno eliminar todo factor capaz de perturbar el proceso electoral aplicando al efecto las facultades que conciernen durante la vigencia del estado de sitio”.
El 30 de julio de 1959, el gobierno de Arturo Frondizi privatizó la Agencia, denominándose “Télam Sociedad Anónima, Periodística, Radiofónica, Cinematográfica, Comercial, Inmobiliaria y Financiera”.
Télam se convirtió en una empresa estatal bajo la dictadura de Juan Carlos Onganía, el 24 de junio de 1968, cuando el Gobierno adquirió el total de las acciones por medio de la Secretaría de Difusión y Turismo.8 En forma paralela, un nuevo marco legal obligó a que toda la publicidad de las empresas y organismos públicos fuera diseñada y difundida por la agencia, decisión que permitió a la empresa generar recursos propios.
Así, con la década de 1960 la empresa retoma su crecimiento al incorporar entre sus abonados a los canales de televisión 7, 9, 11 y 13 y los diarios nacionales. Es la época en que flamantes teletipos reemplazan al correo en la transmisión de las informaciones, se recuerda en Wikipedia.
Década de 1970
Durante la tercera presidencia de Perón (1973-1974) se dispuso que las noticias sobre el país solo podían ser distribuidas en el mercado interno por empresas nacionales. Esto fortaleció la posición de Télam, que absorbió a periodistas de agencias extranjeros que quedaron sin trabajo, y permitió el surgimiento de una agencia privada, Noticias Argentinas.
La agencia estatal no salió indemne de la última dictadura (1976-1983). El gobierno militar utilizó a Télam como un órgano de propaganda de su gestión. En 1980 la agencia se trasladó al edificio que ocupa actualmente en Bolívar 531. Télam y ATC fueron los únicos medios autorizados a informar desde las islas durante la guerra de las Malvinas.
Regreso de la democracia y menemismo (1983-1999)
En 1983 regresa la democracia al país con la asunción de Raúl Alfonsín como presidente. En 1984, las agencias privadas Noticias Argentinas y Diarios y Noticias solicitaron públicamente el cierre de Télam al presidente pero este desestimó el pedido. Durante esta época Télam abrió una corresponsalía en Europa y se incorporó al servicio de agencias latinoamericanas de UNESCO.
En 1992 el presidente Carlos Menem dispuso la intervención de la empresa y dos años después su liquidación. Sin embargo, en 1996 dejó sin efecto el decreto de liquidación para reemplazarlo por uno nuevo que buscaba dejar a Télam sin el monopolio de la publicidad oficial, una de sus principales fuentes de ingresos. Este decreto tampoco llegó a implementarse.
Gobiernos de Fernando de la Rúa y Eduardo Duhalde
En 2000 el Gobierno de Fernando de la Rúa volvió a anunciar el cierre del área de publicidad y la venta de la sede central de la agencia, Bolívar 531, en la ciudad de Buenos Aires, medidas que no se concretaron. Al año siguiente se unificaron todos los medios de comunicación públicos, pasando la agencia a funcionar junto a LS82 TV Canal 7 y LRA Radio Nacional dentro del Sistema Nacional de Medios Públicos. En 2002 recuperó su condición de empresa autárquica bajo el gobierno de Eduardo Duhalde,10 al crearse Télam Sociedad del Estado.
Gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner (2003-2015)
Entre agosto de 2005 y diciembre de 2009 la agencia fue dirigida por Martín Granovsky, experiodista de Página/12. En 2006 la dirección de Télam despidió al jefe del departamento de Contabilidad General, Jorge Claudio Azar, por supuestas maniobras de malversación, algo que fue desmentido por la comisión gremial de la agencia.15 Esto condujo a una huelga que se mantuvo por 38 días.16 En 2009 se lanza el portal Memoria, Verdad y Justicia, un trabajo conjunto del equipo de redactores, editores y corresponsales de Télam com el material organizado en: Derechos Humanos, El Mundo, Lesa Humanidad, Perfiles y Multimedia.17
En 2008 Granovsky fue citado por la Comisión de Libertad de Expresión de la Cámara de Diputados para informar sobre un supuesto intento de soborno vinculado a la publicidad oficial pero no se presentó.
En 2008, el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner publicó el decreto 1311/2008 que le quitó a Télam la difusión de la publicidad oficial al permitir que la Secretaría de Medios contratara de forma directa a agencias privadas de publicidad.
En 2010 Granovsky fue reemplazado por Martín García como director de Télam mediante el decreto 1459/2010.
En una entrevista con el diario La Nación luego de asumir el cargo García se definió de la siguiente manera: “Soy primero militante, después periodista. Los profesionales son como las prostitutas, escriben mentiras en defensa de los intereses de los que les pagan. Los militantes, en cambio, escribimos la verdad al servicio del pueblo”.
El siguiente director de la agencia fue Santiago “Patucho” Álvarez, quien militaba en la agrupación La Cámpora y fue gerente de noticias de la Televisión Pública.
En 2014 se inaugura el nuevo edificio de la agencia de 8 pisos, con estudio de radio, islas de edición y archivo fotográfico y periodístico.
Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019)
Tras la asunción de Mauricio Macri como presidente, Hernán Lombardi fue designado como titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, quien a su vez nombró a Rodolfo Pousá al frente de Télam. Durante su gestión se llevó a cabo un recorte presupuestario que implicó el cierre de los portales web en inglés y portugués y el fin del Reporte Nacional en mayo de 2018 y de todos los suplementos. También se discontinuaron las transmisiones de Radio Télam vía streaming.
El 26 de junio de 2018 la empresa comenzó a enviar telegramas a un centenar de trabajadores de las áreas de Periodismo y Administración. En total fueron despedidas 357 personas, cerca del 40% de la planta.
Gobierno de Alberto Fernández (2019-2023)
A través del decreto 15/2020, Fernández designó al frente de Télam a Bernarda Llorente, quien había sido previamente directora de contenidos de Telefé y periodista en medios radiales, televisivos y escritos. La gestión de Llorente recuperó el área de publicidad oficial y reactivó la radio y los servicios audiovisual y de diarios en papel. En abril de 2020 Télam lanzó la plataforma Confiar para combatir las fake news y la desinformación sobre la pandemia por coronavirus.
Gobierno de Javier Milei (2023-Actualidad)
El 20 de diciembre de 2023 el presidente Javier Milei anuncia en cadena nacional el lanzamiento de un decreto de necesidad y urgencia que plantearía la desregulación de la economía. Entre las medidas se incluía la derogación del régimen de las sociedades del Estado, las empresas del Estado y las sociedades de economía mixta poniendo fin a las mismas y transformando todas las empresas pertenecientes al Estado en sociedades anónimas, incluida Télam.
El 1 de marzo de 2024, durante su discurso en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, el presidente Milei confirmó el futuro cierre de Télam. Durante la madrugada del 4 de marzo el sitio web fue dado de baja, los dos edificios aparecieron vallados y los empleados informaron que empezaron a recibir telegramas en los que se les anunciaba que fueron “dispensados” de prestar servicio por una semana.