El gobernador Martín Llaryora anunció este jueves que la provincia de Córdoba recibió un desembolso de $10.000 millones por parte de la Anses, correspondientes a las cuotas de mayo y junio del anticipo previsto para 2025 en el marco de los fondos de la Caja de Jubilaciones.
El pago se efectivizó tras el acuerdo alcanzado entre la provincia y el Gobierno nacional, con la intervención de la Corte Suprema de Justicia como instancia facilitadora. “Pelear por Córdoba da resultados concretos en beneficio de la gente”, señaló Llaryora en sus redes sociales, destacando que el reclamo sostenido de la provincia logró destrabar una deuda clave en medio del ajuste fiscal.
El gobernador adelantó que en los próximos días se anunciará el destino específico que tendrán estos recursos.
La administración provincial había reclamado reiteradamente por el cumplimiento de los compromisos asumidos por la Nación en el financiamiento de los déficits previsionales no transferidos, como es el caso del sistema cordobés.
El acuerdo representa un alivio financiero en un momento de fuerte tensión entre las provincias y la Nación por la distribución de fondos, y refuerza el mensaje de autonomía fiscal que Córdoba viene impulsando. “Sigamos peleando por Córdoba y por los cordobeses, que da resultados”, afirmó Llaryora.
La transferencia llega en un contexto donde el cumplimiento de los giros nacionales a las cajas previsionales no transferidas se había convertido en un punto de conflicto entre varias jurisdicciones y la administración central.
El reclamo de Córdoba, avalado por antecedentes judiciales, abrió una vía de resolución que ahora se empieza a materializar en hechos.
Días atrás, el jefe de Gabinete de ministros, Guillermo Francos, admitió en su participación en el aniversario de la Fundación Mediterránea que existía un retraso en el pago de las cuotas comprometidas, que son dos, pero que se resolvería esta misma semana.
