A contramano de lo que se había establecido hace menos de un año, a partir de ahora sólo se podrán tratar en la Unicameral proyectos sobre tablas, es decir, sin despacho de comisión, si se cuenta con mayoría especial de dos tercios.
En la práctica, el cambio implica una limitación para el tratamiento de proyectos de este tipo y, en la actual conformación de la Unicameral, favorece al oficialismo, que evita así correr riesgos de que se debatan proyectos de la oposición incómodos para Hacemos Unidos por Córdoba.
El cambio en el reglamento interno fue votado por los 33 legisladores del oficialismo, además de Karina Bruno y de Agustín Spaccesi, quien casualmente había propiciado la modificación anterior. El legislador ahora dio marcha atrás y votó el cambio. El apoyo de estos legisladores aliados habilitó el desempate de la vicegobernadora Myrian Prunotto, quien terminó bajando el martillo para Hacemos.
Hasta la modificación de este miércoles, los proyectos sobre tablas tenían la garantía de que, si no eran tratados en 45 días en comisión, podían ser habilitados en el recinto con mayoría simple. Esa condición quedó anulada, lo que achica la posibilidad de tratamiento de proyectos en estas condiciones.
La oposición se opuso en bloque a los cambios, a pesar de que el radical Miguel Nicolás había presentado una iniciativa con otros cambios. La oposición argumenta el rechazo en que el oficialismo realizó modificaciones al texto que no fueron consensuadas y por lo tanto las rechazó.
Impacto en el “impuestazo”
En la previa de la sesión, el diputado nacional Rodrigo de Loredo advirtió sobre la situación. Este cambio en el reglamento interno tiene un impacto directo en un tema sensible para el oficialismo. Sucede que la oposición hacía cuentas para tratar dentro de unas semanas en el recinto -cuando vencían los 45 días que estipulaba hasta ayer el reglamento- un proyecto que busca morigerar los incrementos del Impuesto Inmobiliario Urbano y el Rural.
“Los que votan el cambio en el reglamento no quieren que se suspendan los incrementos abusivos”, aseguró De Loredo.
El diputado manifestó que, como el oficialismo controla todas las comisiones, “nunca habrá despacho” de ese proyecto y por lo tanto será “imposible” tratarlo en el recinto porque a la oposición le es imposible reunir los dos tercios que disponen las nuevas reglas internas de la Unicameral. “El peronismo hizo esta jugada cuando advirtió que estábamos cerca de lograr los votos para frenar el impuestazo”, dijo el líder radical.
Otros cambios
Además del punto sobre el tratamiento sobre tablas, el oficialismo incluyó otros cambios que fueron cuestionados por la oposición. Por ejemplo, el uso de la palabra en el recinto, las reconsideraciones y la frecuencia de las sesiones.
Ahora, quedó por escrito que la Unicameral sesionará cuando lo decida Labor Parlamentaria sin ninguna obligación de frecuencia.
“El oficialismo de Córdoba presentó hoy, de manera sorpresiva, una propuesta para modificar el reglamento interno con el claro objetivo de silenciar a la oposición y limitar su margen de acción. A través de una maniobra reglamentaria, intentan cercenar el debate parlamentario y transformar al Poder Legislativo en una simple escribanía del Ejecutivo, tal como si fuese un ministerio, decidiendo quiénes, cuándo y cuánto pueden hablar”, expresó la UCR en un comunicado.