El proyecto del gobernador Martín Llaryora para una nueva ley de seguridad provincial se aprobaría en la sesión de este miércoles en la Legislatura de Córdoba con votos del oficialismo y con algunos legisladores “aliados” de los monobloques.
A ellos, podrían sumarse sobre la hora parlamentarios del interbloque de Juntos por el Cambio. Pero, para esto la oposición exigirá más modificaciones.
Es que este martes, la concesión del oficialismo para sumar algunas modificaciones al proyecto logró que Hacemos Unidos por Córdoba sumara votos de Juntos por el Cambio.
¿Quienes? Se apunta a los radicales que fueron intendentes; al bloque radical Construyendo Córdoba, que preside Dante Rossi; y al PRO.
Los exámenes toxicológicos para funcionarios provinciales una vez por año, la eliminación de la posibilidad que los guardias locales “deban” aprehender al infractor o delincuente in fraganti, y las capacitaciones de los agentes a manos del sector público (y no privado) fueron algunas de las consideraciones que quedarán plasmadas en el despacho por la mayoría que será tratado este miércoles.
Quedó en estudio, además, una modificación pedida por el legislador Dante Rossi para que el uso de armas menos letales se autorice para los municipios de más de 30 mil habitantes, que es donde el radical aseguró que existen más problemas de seguridad, y para las zonas rojas.
Este cambio también quedará sujeto al análisis del oficialismo, por lo que en la reunión de Comisión de Labor Parlamentaria el PJ tendrá algunas certezas acerca de qué tan cómodo llegará al recinto.
Pero los más duros de Juntos por el Cambio ya anticiparon que no habrá acompañamiento.
“Este proyecto tiene deficiencias importantes y fragmenta la responsabilidad de la seguridad en Córdoba”, confió una de las legisladoras radicales.
Y Gregorio Hernández Maqueda (Coalición Cívica-ARI) anticipó que presentará un dictamen en rechazo al proyecto del oficialismo.
Reunión
Este martes se desarrolló la segunda reunión consecutiva en comisión, en la que legisladores y expertos analizaron cada uno de los artículos de la ley, como las guardias locales, el dictado de las capacitaciones y cómo se fusionaría el trabajo de la seguridad pública con la privada, además del rol que tendrán comunas y municipios.
Hacemos Unidos por Córdoba tiene asegurados los 33 legisladores propios y descuenta que este miércoles se sumen los votos de Karina Bruno, quien se escindió del interbloque de Juntos por el Cambio, y de Federico Alesandri, de Creo en Córdoba.
El libertario Agustín Spaccesi también podría dar su apoyo a algunos artículos, por lo que el oficialismo se impondría por mayoría con 36 votos y sin la necesidad de que la vicegobernadora Myrian Prunotto deba desempatar (como sucedió en la anterior sesión, cuando se debatió el tema del Tribunal de Cuentas).
Esta será la primera pulseada legislativa fuerte que tendrá Llaryora, en una Unicameral de fuerte paridad entre el PJ y Juntos por el Cambio.
