Ala sorpresiva decisión del gobernador Martín Llaryora de convocar a una nueva licitación para las tragamonedas (slots), tres años antes de que venza la concesión monopólica que tiene la compañía cordobesa CET (Grupo Roggio y el empresario Miguel Caruso), se suma otro aspecto significativo: pasarán a manos de privados los casinos que administran los juegos de paño, que hasta ahora están a cargo de la Lotería de Córdoba.
El traspaso al sector privado de los casinos tiene una excepción: el de Villa Carlos Paz, ubicado en la costanera de esa ciudad y el que más factura entre estos juegos.
Desde la Lotería de Córdoba remarcaron que, si bien una de las novedades de esta licitación es que los privados se harán cargo en su totalidad de los casinos, el organismo provincial retendrá el de Villa Carlos Paz, que recauda el 75% de los casi $ 7 mil millones que el año pasado se jugaron en las mesas de ruleta y de póquer. El próximo miércoles, en la Lotería, se abrirán los sobres de la licitación anticipada de las tragamonedas y también de los casinos.
Durante el año pasado, ambos rubros tuvieron una facturación bruta de alrededor de $ 45 mil millones.
De este modo, a 13 meses de haber asumido la gestión, el gobernador Llaryora decidió un cambio rotundo en el negocio de los casinos en Córdoba, que hasta ahora estaba en manos de una única empresa privada, CET (Concesionaria de Entretenimiento y Turismo) y de la Lotería.
La decisión de la gestión llaryorista es que se termine el monopolio en el negocio de las tragamonedas que tenía CET desde el año 2002, cuando el gobernador José Manuel de la Sota le concedió un contrato por 20 años.
Ese vínculo fue prorrogado hace dos años por el gobernador Juan Schiaretti, hasta 2027.
En su momento, la empresa CET –que, según fuentes de la Lotería, no cumplió algunos puntos del contrato–, con el argumento de las pérdidas económicas que le generó la pandemia de Covid (2020 y 2021), solicitó una prórroga, que la gestión schiarettista le concedió hasta 2027.
Ahora, la Lotería de Córdoba, bajo la presidencia de David Urreta, dirigente del partido Acción para el Cambio (Apec), pergeñó esta megalicitación que tendrá el próximo miércoles el puntapié inicial con la apertura de los sobres para conocer antecedentes, trayectoria, propuesta y modelo de negocio ofrecidos por las empresas que se presenten.
Hasta el momento, hay cinco grupos empresariales que pagaron los $ 10 millones para adquirir los pliegos de la licitación. Todos tienen antecedentes en el negocio del juego. No se descarta que se presenten uno o dos más.
Nuevos jugadores
Las empresas que adquirieron los pliegos e hicieron consultas en la Lotería para presentarse son la cordobesa CET; la compañía Boldt (que tiene casinos en Santa Fe y en Buenos Aires); Casino Victoria (Daniel Mautone-Daniel Angelici), con negocios en provincia de Buenos Aires y en Entre Ríos, y dos empresas de Mendoza: Andesmar (transporte, hoteles y casinos) y Grupo Fuente Mayor (casinos y hoteles).
Desde la Lotería destacaron que estas empresas representan los distintos modelos de negocio en el rubro que hoy existen en las principales provincias: Córdoba, Santa Fe, Buenos Aires, Entre Ríos y Mendoza.
La licitación se dividió en tres tramos, y probablemente terminará con el monopolio de CET, que desde hace 23 años explota las slots.
Inicialmente, la Lotería movió la primera ficha convocando a una licitación para “inversiones de infraestructura turística y de esparcimiento en las ciudades de Alta Gracia, Río Ceballos y Cruz del Eje”. Esta última se incorpora a las ciudades que tendrán hotel, casino y tragamonedas.
La intención de la gestión llaryorista de salir del esquema monopólico en el juego quedó reflejada en las características de la licitación, cuyos sobres se abrirán este miércoles.
El conjunto de salas de toda la provincia se dividió en tres grupos: dos “anillos” denominados “turístico” y “federal”, y un tercer agrupamiento que integran los casinos de Alta Gracia, de Río Ceballos y de Cruz del Eje.
Para equilibrar el reparto de la torta de apuestas, cada una de las salas de Villa Carlos Paz, las de mayor facturación, reportará a sendos anillos: el casino de costanera estará en el anillo “turístico”, y el del centro de “la Villa” integrará el “federal”.
En el anillo “turístico”, estarán las salas de Villa Carlos Paz (costanera), Cosquín, Embalse, Almafuerte, La Falda, Mina Clavero, Miramar, San Francisco y Villa María.
Mientras que, en el anillo “federal”, están las salas de Villa Carlos Paz (centro), Corral de Bustos, Cruz Alta, General Roca, Río Cuarto, Laboulaye y Morteros.
“En el anillo turístico, que comprende las zonas vacacionales, se tuvieron en cuenta las características de las ciudades que reciben masivamente a los turistas en verano y en invierno, con una gran caída en el resto del año. Mientras que, para el anillo federal, en cuyos casinos el nivel de facturación es más constante, tendrán mucha influencia las propuestas de inversión en infraestructura para el entretenimiento, como restaurantes, pubs y centros comerciales”, informaron fuentes de la Lotería.
Desde el organismo que administra el negocio del juego, brindaron toda la información requerida por La Voz, pero los funcionarios se abstuvieron de brindar declaraciones mientras dure el proceso licitatorio.
Presentación
Más allá de la intención de la gestión llaryorista de que haya más empresas involucradas en el negocio del juego, CET participará en los tres tramos de la licitación, por lo cual podría darse el caso de que, si sus propuestas superan a las de sus competidores, retendría el monopolio en Córdoba.
La Voz intentó contar con la opinión de algún directivo del Grupo Roggio y del empresario Caruso (Casinos Mac Group), pero ninguno quiso opinar en este momento.
Un directivo de Roggio, quien pidió que no se mencionara su nombre, admitió la sorpresa de la compañía, por lo que calificó de “significativa antelación” la convocatoria a la licitación, cuando CET tiene la concesión hasta 2027.
Sin embargo, la fuente del Grupo Roggio admitió que CET “se adaptará” al nuevo esquema que impulsa la Lotería, por lo cual participará en todos los tramos de la licitación.
De todas maneras, está claro que la intención de la Lotería es salir del monopolio, tratando de incentivar que haya nuevos jugadores en el millonario negocio de las slots y de los casinos.
Habrá que esperar hasta el final del proceso de licitación, que, en caso de no haber postergaciones, será el 27 de febrero, para saber si hay nuevos actores en el negocio de los casinos en Córdoba. Por lo bajo, la apuesta de la Lotería es que distintas empresas ganen cada porción de la licitación.
Novedad
Si bien en el negocio del juego las slots son las de mayor facturación (casi $ 38 mil millones el año pasado), la gran novedad de esta licitación es que la Lotería privatizará los casinos.
Cada casino será una única unidad de negocio que administrará un privado, con la mencionada excepción del casino de Villa Carlos Paz, el que más ganancias brinda, en la facturación de $ 6.700 millones que generaron en 2024 los juegos de paño.
Para las autoridades de la Lotería, el actual esquema en el cual convivían un privado a cargo de las tragamonedas y el organismo administrando las mesas de paño, “es inviable”.
“Apostamos a que los privados impulsarán una fuerte inversión en infraestructura para el turismo. Cada casino será una unidad de negocio que conducirá una empresa privada, que para ganar tendrá que invertir”, dijeron fuentes oficiales de la Lotería.
Desde el organismo oficial se aclaró que CET seguirá con la administración de las slots hasta 2027.
Quienes ganen los distintos tramos de la licitación podrán hacerse cargo de los juegos de paño y servicios anexos desde marzo, siempre y cuando no sea la empresa cordobesa que hoy tiene la concesión de los hoteles, administración que retendrá hasta el final del contrato.
Actualmente, por ley provincial vigente, en Córdoba está autorizado que funcionen 5.044 tragamonedas, pero CET sólo tiene en funcionamiento 4.022.
Si hay nuevos concesionarios, podrían aumentar el número de slots. Incluso, autorización del municipio mediante, podría ampliarse la cantidad de localidades que tengan casino, que deberán estar a más de 22 kilómetros de la plaza San Martín de la ciudad de Córdoba.
La Lotería se desprenderá de 300 empleados
Con la decisión de concesionar la mayoría de los casinos de Córdoba, la Lotería se desprenderá de 160 trabajadores, que deberán ser absorbidos por las empresas que ganen los distintos tramos de la licitación.
Quedarán en la órbita de la Lotería de Córdoba los 200 trabajadores del casino de Villa Carlos Paz, que seguirá siendo estatal.
La Lotería también se desprenderá de otros 175 empleados bancarios que fueron transferidos al organismo del juego cuando se eliminó el Banco Social.
Por una ley que se aprobó el 27 de diciembre pasado, pero que aún no fue reglamentada, estos 175 exempleados del Banco Social podrán acogerse al beneficio de la jubilación provincial, con el estatus de bancarios, o pasar a la pasividad (cobrar sin ir a trabajar hasta tener la edad para jubilarse), también con salarios de bancarios.
Es decir, que la Lotería se desprendería de alrededor de 345 empleados.
De todos modos, hay algunas cuestiones por resolver, como, por ejemplo, los exempleados del Banco Social que iniciaron juicios laborales, a los que deberían renunciar para acogerse al beneficio de la ley sancionada por la Legislatura en la última sesión del año pasado.
La Lotería llegó a tener mil empleados. Luego de la licitación y de las jubilaciones, en la Lotería quedarían unos 300 empleados.