Cada vez que lo consultan por cuestiones electorales, Martín Llaryora responde que su prioridad es la gestión provincial, y que no está pensando en las urnas. En realidad, el gobernador no está al frente de las negociaciones, pero están muy avanzadas las conversaciones de Juan Schiaretti con el gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, para el nuevo partido Hacemos que construye el exgobernador cordobés se integre a la alianza Unidos, que en la provincia vecina lidera el mandatario santafesino.
Pullaro no tiene reelección, pero la casi segura modificación de la constitución santafesina le permitirá tener esa posibilidad, como en Córdoba sí la tiene Llaryora.
El peronista Llaryora y el radical Pullaro siempre tuvieron una buena sintonía, que se refleja en cada acto de la Región Centro. Pese a tener orígenes partidarios distintos comparten la visión del escenario político nacional: lejos del kirchnerismo como también de los libertarios.
Ambos mandatarios salieron a respaldar con fuerza el reclamo del campo para que el Gobierno nacional elimine, o al menos reduzca las retenciones agropecuarias.
Pero las coincidencias entre el cordobés y el santafesino van más allá del reclamo de los campesinos. Los dos creen que la gestión del presidente Javier Milei está derrotando a la inflación, pero tienen muchas dudas sobre sobre el futuro del plan económico libertario.
Los dos tienen contactos más seguidos de los que trascienden. Y un dato político que difunden desde el Centro Cívico: no buscarán confrontar con el Presidente, pero ya no le temen a sus furiosas embestidas discursivas, que el año pasado hicieron mella en la imagen de ambos gobernadores. Llaryora y Pullaro están dispuestos a crear el eje anti-Milei en el interior. “Aunque también antikircherista”, aclaró, por si hacía falta, un llaryorista puro.
Juez, cerca de Milei, y De Loredo se arrima a Macri
Se sabe de la relación personal que Luis Juez mantiene con el presidente Javier Milei, que parece atravesó el obstáculo de la expulsión del senador Edgardo Kueider, cuando el cordobés votó por la salida en momentos en que los libertarios querían darle una licencia para no otorgarle otra banca al kirchnerismo. La reemplazante del senador entrerriano expulsado es una cristinista pura.
A fines del año pasado, Rodrigo de Loredo consiguió una reunión de su bloque con el jefe del Estado, en la Casa Rosada, lo que alimentó las versiones de un posible acuerdo electoral entre la UCR y los libertarios en Córdoba.
De Loredo no descartó esta posibilidad, pero en los últimos días, en una entrevista al diario Clarín, el diputado cordobés se mostró más cerca de Mauricio Macri que de una acuerdo con los libertarios.
Un radical que no integra su grupo interno pero que conoce bien a De Loredo pronosticó que el plan del diputado es más ambicioso: ser cabeza de lista en Córdoba de una alianza que integre a los libertarios, el PRO, la UCR y el juecismo. El senador ya confirmó que apoyará la lista que bendiga el Presidente de la Nación.
De Loredo se arrimó a Macri porque cree que puede ser el fogonero de esta alianza en Córdoba para “darle una paliza” al PJ cordobés, según pronosticó la misma fuente radical.
Quinteros evitó un contacto con Villarruel
A diferencia del año pasado, cuando Victoria Villarruel vino a Córdoba para participar de una de las noches del Festival de Doma y Folklore de Jesús María, y los funcionarios y dirigentes peronistas buscaban una foto con la segunda autoridad nacional, esta vez ocurrió todo lo contrario. Nadie solicitó un encuentro con la vicepresidenta.
Sólo la vicegobernadora, Myrian Prunotto, y por una cuestión protocolar, fue a recibir a la vicepresidenta en la apertura del festival.
Uno de los que podría haber tenido un contacto con Villarruel fue el ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, con la excusa de la cuestión de seguridad durante la estadía de la vice en Villa Allende, que se prolongó hasta el sábado último.
Sin embargo, el funcionario llaryorista evitó una foto con la vicepresidenta. En el Centro Cívico aseguran que Quinteros tiene una excelente relación con la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, quien tuvo un duro enfrentamiento con Villarruel, por el gendarme argentino detenido en Venezuela.
“Ni loco ‘el Juampi’ (Quinteros) se iba a sacar un foto con Villarruel, cuando es el ministro provincial que mejor relación tiene con Bullrich. No se iba a meter en la interna libertaria, ya tiene suficiente con las embestidas de (Luis) Juez”, dijo –con ironía- alguien que trabaja cerca del exlegislador y actual funcionario provincial.
García Elorrio dice que su partido presentará lista en octubre
En medio de la incertidumbre que hay en el escenario cordobés, de cara a las elecciones legislativas nacionales de octubre, el vecinalismo hizo la primera confirmación: el exlegislador provincial Aurelio García Elorrio aseguró que su partido competirá con lista propia y sin alianzas en Córdoba.
Encuentro Vecinal Córdoba hace casi una década que presenta candidatos en cada elección provincial o nacional. Lo que aún no está definido es quién encabezará la boleta. Hay dos alternativas que manejan el partido vecinalista: el legislador provincial Rodrigo Agrelo, muy opositor de la gestión del gobernador Martín Llaryora, o el propio García Elorrio, que a sus cuestionamientos al PJ provincial también le suma crítica a la gestión libertaria nacional.
“En el 2027, cuando se dispute el poder provincial, trabajaremos para construir una alianza fuerte que pueda ganarle al PJ. Pero para estas elecciones legislativas nacionales conservaremos nuestra ideas e identidad”, dicen desde el entorno de García Elorrio.
