Exactamente 30 días después de la eliminación del cepo cambiario para personas humanas, el Indec dio a conocer este lunes la variación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) correspondiente al mes pasado. En Argentina, la inflación nunca es un tema menor, y mucho menos ahora, cuando el fin de las restricciones para acceder al dólar oficial hacía prever un abril “caliente”, especialmente tras el 3,7% registrado en marzo, el mayor incremento mensual en siete meses.
Sin embargo, ese rebote del nivel general quedó en amague, y el Gobierno de Javier Milei no tardó en celebrarlo como un gol.
“El mejor de la historia” es la frase que el presidente Javier Milei eligió para postear una foto fundido en un abrazo con el ministro de Economía, Luis Caputo. Además, disparó otros posteos en X descalificando publicaciones de medios que, como la mayor parte de las consultoras, hablaban, a mediados de abril, de una inflación más cerca del 5%.

Según el organismo que dirige Marco Lavagna, la inflación de abril fue del 2,8%. Este dato deja dos puntos clave para el análisis: por un lado, parte del efecto en los precios por la salida del cepo ya se había anticipado en marzo, con una suba que superó ampliamente las proyecciones privadas, impulsada por formadores de precios que buscaban cubrirse ante una posible devaluación más agresiva. Por otro lado, es cierto, el impacto final fue bastante menor al que esperaban la mayoría de los analistas, incluso los afines al plan económico de la Casa Rosada.
Para compensar la devaluación del dólar oficial (que arrancó en un 12% y luego retrocedió), el Gobierno libertario viene pisando nuevas actualizaciones de tarifas en los servicios públicos, también frenó incrementos en la nafta (incluso llegó a bajar de precio) y está haciendo lo posible (e imposible) para evitar que los acuerdos de salarios del sector privado superen el 1,8% mensual. El objetivo es evidente: contener toda señal de rebote de la inflación de cara a las elecciones de fin de año.
Vamos las bandas
En el sostenimiento de la inflación en niveles entre el 2% y el 3% parece haber contribuido una dinámica cambiaria luego del cepo que muestra un comportamiento con más dólares en los bancos y menos pesos en la calle.
A esto lo expuso Javier Bolzico, presidente de Adeba, la asociación que agrupa a los bancos argentinos, cuando publicó un gráfico con datos del Central que muestra que los depósitos en dólares crecieron en unos U$S 1.000 millones tras la implementación de las bandas cambiarias (hasta U$S 31.000 millones).
Los mismos datos de Adeba también muestran una menor extracción de efectivo y, en paralelo, un fenómeno más estructural: el incremento de las cuentas en dólares tras la salida del cepo.
Caputo, por su lado, ponderó que la variación de la Canasta Básica Alimentaria fue del 1,3% el mes pasado, apenas por encima del 0,9% que trepó la Canasta Básica Total. Esas canastas, que también fueron dadas a conocer este miércoles por el Indec, determinan las líneas de indigencia y pobreza ($ 1.110.063 para una familia tipo), respectivamente.
La variación de precios acumulada en el primer cuatrimestre es de 11,6%, la menor desde 2020 y la inflación interanual, 47,3%. “Abril fue el duodécimo mes consecutivo de desaceleración en la comparación con igual mes del año anterior”, dijo el funcionario.
Mayo: cómo viene la inflación
Para la inflación de mayo, una de las “anclas” serán los anuncios oficiales de este miércoles: la reducción de aranceles e impuestos internos para algunos electrónicos (celulares, consolas de videojuegos) y electrodomésticos (TV, aires acondicionados) con la idea de que se reduzca su precio de venta.
“Por ahora, no vemos aumentos marcados de precios”, le dijo a La Voz Germán Romero, director del Departamento de Estadísticas y Tendencias del Centro de Almaceneros y Comerciantes Minoristas de Córdoba. “La tónica de las dos primeras semanas de mayo es tranquila, no se han recibido, por ahora, nuevas listas de precios por parte de los distribuidores”, amplió.
Según el análisis de EcoGo, que sigue semanalmente el precio de un conjunto de productos básicos, en la segunda semana de mayo “los alimentos consumidos dentro del hogar registraron una suba del 0,4%, marcando una leve aceleración de 0,1 puntos porcentuales respecto de lo registrado la semana previa”. Con ese dato, de acuerdo con esa consultora, “la inflación en alimentos consumidos dentro del hogar ascendería a 2,5% en mayo”. Para los alimentos consumidos fuera del hogar, básicamente restaurantes y bares, la estimación se ubica en 2,3%.
En cuanto al nivel general, la proyección es 2,2% al final de este mes. “La baja respecto de la proyección inicial responde a una menor inflación a la proyectada, particularmente en el rubro alimentos, donde los consumidos fuera del hogar no mostraron variaciones”, dice EcoGo. Y agrega: “El descenso en el precio de los estacionales -particularmente frutas, verduras y transporte por turismo- está contribuyendo también a mantener el indicador moderado”.