El presidente Javier Milei se mostró altamente optimista respecto al futuro económico del país, proyectando una “avalancha de dólares” que ingresará gracias a las fortalezas productivas nacionales. El mandatario aseguró que esta situación provocará un aumento “fenomenal” de los ingresos de los argentinos.
Sus declaraciones se realizaron antes de su viaje a Washington para una reunión con Donald Trump, donde se esperan nuevos anuncios sobre la asistencia financiera de la Casa Blanca.
En concreto, Milei afirmó: “Nos van a salir dólares por las orejas”.
El optimismo presidencial se fundamenta en el potencial de sectores clave como la minería (cobre, oro, litio, tierras raras, uranio), el gas, el petróleo y la energía nuclear. Milei remarcó que esta capacidad para generar divisas tendrá un impacto directo en el empleo y los salarios.
Debido a que el sector servicios es intensivo en mano de obra, el presidente proyectó que este influjo de divisas hará que “los salarios en Argentina se van a disparar fuertemente”.
El rumbo económico fijo
A pocos días de las elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre, el Presidente descartó la posibilidad de modificar la hoja de ruta económica, independientemente de los resultados en las urnas. En diálogo con el periodista Luis Majul, Milei sostuvo que su programa no se moverá un “ápice”.
“No voy a cambiar la política. La dirección es la correcta”, enfatizó, ratificando la continuidad del ajuste, la desregulación y la búsqueda del equilibrio fiscal. “¿Quiere que abandonemos el equilibrio fiscal? De ninguna manera”, insistió.

El jefe de Estado indicó que existe un consenso amplio en el arco político (exceptuando al kirchnerismo) sobre las reformas estructurales necesarias para el país, como la reforma tributaria y la laboral. Milei se mostró dispuesto a sumar técnicos al Gabinete que ayuden a mejorar la productividad de la gestión, siempre que compartan la agenda de crecimiento.
Blindaje financiero de EE. UU.
La administración destacó que la alianza con Estados Unidos juega un papel central en la estrategia económica. La administración norteamericana definió a Argentina como su aliado y ofreció apoyo político y financiero frente a presiones internas o externas.
El Departamento del Tesoro norteamericano informó recientemente el otorgamiento de una asistencia financiera a Argentina superior a los U$S 20.000 millones, que incluye la compra de pesos en el mercado local.
Esta estructuración de apoyo financiero con EE. UU. asegura que el país no tendrá problemas de liquidez. Milei aseveró que este respaldo elimina “el fantasma del default” de la ecuación. El presidente explicó que si el mercado no acompañara en la apertura para refinanciar la deuda (rollear), Argentina podrá contar con el financiamiento de Estados Unidos.
Además, el jefe de Estado afirmó que se cuenta con herramientas preventivas, como líneas de crédito, swap de monedas e intervención directa en los mercados, para enfrentar episodios de volatilidad cambiaria.
En la antesala de las nuevas definiciones electorales, el jefe de Estado transmitió un mensaje de calma. El Presidente reiteró que el camino trazado es “el correcto” y le pidió a la sociedad no abandonar el sendero de las reformas económicas: “Estamos a mitad de camino. Hagamos que todo lo que se hizo valga la pena”.

























