Aunque faltan más de dos meses, el cierre de listas comienza a sacar lo peor de los dirigentes políticos, que empiezan a olfatear campañas y movimientos con potencial de desocupar sillas con poder real. Es la expectativa que genera en el peronismo una eventual candidatura a diputado nacional de Manuel Calvo, hoy ministro de Gobierno.
Una hipotética candidatura despejaría una de las poltronas más apetecibles. Con la Legislatura planchada por el cambio de reglamento interno, algunos legisladores oficialistas ven la posibilidad de dar un salto al Ejecutivo.
En la bancada de la mayoría, hay un exministro –Facundo Torres– y un exsecretario municipal –Miguel Siciliano– que siempre suenan en borradores de gestión.
“Hay molestias en el peronismo por las jugadas de Orlando Arduh (número 2 de Calvo) y Myrian Prunotto, que van a los pueblos y miman más a los radicales que a los nuestros”, se queja un legislador peronista, tal vez por desconocer la función que tiene, por ejemplo, el propio Arduh.
Se refiere al armado del bloque de intendentes de la UCR, el PRO y el vecinalismo que articula el presidente del bloque de la UCR, y a las giras que encara la vicegobernadora por el interior provincial, en las que suele reunirse con dirigentes radicales.
“Uno (por Arduh) fondea al intendente radical, y el nuestro, que perdió o que quiere disputarle el municipio en 2027, se queda masticando bronca. La otra (por Prunotto) llega al pueblo y en vez de ir a visitar a nuestro intendente, va y le levanta la mano al radical que quiere ganarnos en 2027... Yo no sé quién nos va a juntar los votos”, dice un peronista crítico de la estrategia desplegada por Calvo por pedido del gobernador Martín Llaryora.
Cada vez que aparecen esos planteos, en el Panal recuerdan los dichos que el gobernador pronunció cuando firmó el último Acuerdo Federal con más de 400 intendentes: “Lo que no entienden algunos en el peronismo es que yo tengo que gobernar para todos”.

El Sukaria vuelve al Concejo y espera por definiciones
Días atrás, la macrista Soher El Sukaria entregó el informe de la auditoría que realizó en la Defensoría del Público, un área que depende del Congreso de la Nación y que el gobierno de Javier Milei dijo que cerraría una vez que se conociera cómo fue su funcionamiento durante las administraciones del kirchnerismo/albertismo.
Tras ese paso en el ámbito nacional, El Sukaria retomará esta semana su lugar en el Concejo Deliberante de la ciudad de Córdoba, espacio que ganó al acompañar en la fórmula capitalina al radical Rodrigo de Loredo en 2023. Desde allí, piensan en su entorno, buscará consolidarse como la figura del PRO en la Capital.
El objetivo electoral que viene es poder estar en la discusión por un lugar en representación del macrismo en algunas de las listas con expectativas para llegar al Congreso.

El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, recibió un reporte que, en trazos generales, habla de una reducción de personal de la Defensoría que llegó al 65%. También, que se cerraron estructuras como la polémica “Nodio” y otros espacios que “sólo tenían como objetivo plantear miradas ideologizadas”. Además, el trabajo dice que las cuentas de la Defensoría quedaron “equilibradas” y que se ahorró dinero por el equivalente a “900 jubilaciones mínimas al mes”.
El proyecto para prohibir a “naranjitas” tiene octubre en el horizonte
Gregorio Hernández Maqueda, legislador liberal en la Unicameral cordobesa alineado con el presidente Javier Milei, salió nuevamente a buscar apoyos a su proyecto para prohibir la presencia de “naranjitas” en el cobro del cuidado de autos en la vía pública en toda la provincia.
Pese al rechazo que ya recibió en la Legislatura de parte de oficialistas y de algunos opositores, reactivó su proyecto. Esta vez sumó el apoyo de los concejales capitalinos opositores Jessica Rovetto Yapur y Luciano Agüero Díaz.
En una reunión organizada sobre este tema, también estuvieron las legisladoras provinciales por la UCR Ariela Szpanin y Alejandra Ferrero, y la del PRO Patricia Botta.
El ex-lilito considera que algún tipo de avance legislativo en este debate podría darle cierto protagonismo para intentar pulsear por un lugar en la lista de diputados nacionales en la que esté La Libertad Avanza.
Sin embargo, esa chance asoma remota si se tiene en cuenta la aparición de Franco Mogetta y los planes que tiene el libertario Gabriel Bornoroni de buscar butacas para dirigentes de su entorno, a los que considera “fieles” a Milei.
Passerini, entre la obra pública y la “humanización” de la gestión
Tras los cambios en el gabinete municipal capitalino, el intendente Daniel Passerini procura recuperar iniciativa política con la mira puesta en octubre, un escenario siempre complejo para el oficialismo de Córdoba, que suele perder esas elecciones.
Lo cierto es que Passerini vuelve a apostar por mostrarse al frente de la obra pública pero sin descuidar su agenda, que impulsa la ‘humanización" de la gestión, vinculada a la salud y a la educación.
Sin embargo, esta agenda “más humana” no parece tener por ahora un reconocimiento electoral, admiten cerca del intendente. El planteo de fondo es contra las políticas del Gobierno nacional. De hecho, Passerini anunció que el laboratorio municipal proveerá los medicamentos que dejarían de llegar a la Ciudad después de octubre por la caída del programa Remediar.
“Entendemos que más temprano que tarde la agenda de Passerini se impondrá por la coyuntura nacional, y pensamos darle a los vecinos lo que siempre se le pide a un intendente: obra pública”, es el resumen para este “relanzamiento”.
De Loredo, anfitrión de una juntada de concejales de la UCR
La velada se estiró hasta mucho más allá de la medianoche del sábado. Rodrigo de Loredo, líder del radicalismo cordobés, reunió a los concejales capitalinos de la UCR en su casa, con el doble objetivo de compartir un momento militante, pero además actualizarse sobre la situación de la Ciudad escuchando de primera mano las miradas de quienes llegaron a las bancas en la boleta que él encabezó a mediados de 2023.
Además de los concejales, hubo dos invitados “especiales”: el legislador provincial Miguel Nicolás y Juan Negri, con tropa propia entre los ediles.

El tema central del encuentro fue la situación de la Capital, administrada por el peronista Daniel Passerini. Hubo coincidencias en criticar el rumbo del gobierno municipal. Los tópicos tuvieron que ver con la “insuficiencia” y “escasa” relevancia de los cambios que se realizaron en el gabinete capitalino.
También se cuestionó “la falta de reflejo y especialmente de soluciones para los problemas estructurales” de la Ciudad.
Y hubo, además, un espacio para el análisis político del por qué de esas falencias: “fuerte endeudamiento” heredado de la gestión de Llaryora e “interna entre las tribus del PJ” aparecieron en el intercambio entre los radicales.
De Loredo explicó a los presentes que aún no hay una decisión sobre la estrategia a decidir para los comicios de octubre, aunque sí adelantó que la intención es construir “una alianza lo más grande posible” con el objetivo de ganarle al peronismo.