La Provincia y la Mesa de Enlace del sector agropecuario tendrán este miércoles una reunión para definir cuáles serán las nuevas obras que quedarán incluidas en el Fondo de Desarrollo Agropecuario (FDA).
El encuentro entre los funcionarios y la dirigencia se producirá a semanas de la fuerte polémica suscitada por el aumento del impuesto Inmobiliario Rural. Para el Gobierno, gran parte de esas diferencias han quedado superadas y para sostener la afirmación expone un dato no menor.
Si bien el pago único del Rural vence recién en mayo, “ya pagó más del 50 por ciento de los contribuyentes”, afirman en el Ministerio de Bioagroindustria. Este volumen le anticiparía a la cartera agropecuaria una proyección de recaudación en torno de los 120 mil millones de pesos para todo el año dirigida al fideicomiso.
Esos recursos están destinados de manera principal al mantenimiento de caminos rurales y a la pavimentación de rutas de la producción. Con ese dinero, en tres años se pavimentaron 500 kilómetros.
Como es un fondo con destino específico, la disposición final debe ser consensuada con la Mesa de Enlace. De eso tratará la reunión programada para el primer día hábil de marzo, con la participación del ministro del área, Sergio Busso. De paso, el diálogo servirá para repasar lo ocurrido con el inmobiliario en un mano a mano directo.
Los mecanismos de la ejecución presupuestaria hacen que varias obras acordadas en su momento hayan sido licitadas ahora y estén en la etapa final hacia su inicio.
Es el caso de los pavimentos entre Baigorria - Río Seco y El Fortín – Noetinger (donde funciona una usina láctea). Juntas suman $ 40 mil millones. También, el enripiado que unirá Villa Sarmiento, en el sur provincial, con la ruta 27.
También están las obras terminadas, como los 28 kilómetros entre Pozo del Molle y Los Ucles, y la ruta que une la localidad de Elena con la turística y agropecuaria Río de los Sauces.
Pero, a Bioagroindustria llegaron unos 150 pedidos de obras, pavimento, ripio o mejoras, y esas prioridades son las que conversarán los funcionarios con la dirigencia agropecuaria, atemperados los ánimos por el impacto tributario.