Horas después de la visita de Javier Milei a Bahía Blanca, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad declarar la emergencia ambiental, económica y habitacional en la ciudad bonaerense y otros municipios afectados por el temporal desatado los días 7 y 8 de marzo. El objetivo es que el Gobierno nacional aporte fondos extraordinarios para mitigar la catástrofe que ya se cobró la vida de 16 personas.
El proyecto que se tomó como base fue presentado por la exministra de Desarrollo Social Victoria Tolosa Paz (Unión por la Patria), al que se sumó otro de José Luis Espert (La Libertad Avanza). Hubo un tercer proyecto del Frente de Izquierda pero, a diferencia de los otros, no logró mayoría para ser incorporado al temario de la sesión.
Ahora, en el Senado esperan que Diputados acelere el giro del proyecto aprobado para tratarlo rápidamente y convertirlo en ley. De hecho, para este miércoles a las 17.30 está prevista una reunión de la Comisión de Presupuesto y Hacienda por ese tema.
La emergencia será por el término de 90 días, prorrogables por igual plazo por el Poder Ejecutivo Nacional. En ese lapso, la Nación destinará una partida extraordinaria (no se especifica el monto) para colaborar con la reconstrucción de la localidad y de las condiciones de vida de sus habitantes, en coordinación con el gobierno bonaerense y municipios. Para cumplir con los giros, la Jefatura de Gabinete deberá reasignar partidas presupuestarias.
“Es muy responsable no haber puesto un monto, sino dejar esta posibilidad en manos de la mesa de trabajo conjunta con las máximas autoridades de la Nación y la provincia”, explicó Tolosa Paz. El intendente de Bahía Blanca, Federico Susbielles, dijo que se necesitan 400.000 millones de pesos, pero el proyecto aprobado también contempla la asistencia a otras localidades cercanas, como Villarino, Coronel Suárez, Coronel Rosales, Guaminí, Puan y Alsina.
En la iniciativa avalada en Diputados se contemplan además medidas de asistencia financiera como líneas de crédito con tasas bonificadas; la suspensión y renovación de las obligaciones bancarias y deudas pendientes de productores locales; y la suspensión por hasta 90 días de juicios y procedimientos administrativos de cobro de acreencias vencidas antes de la emergencia.
Asimismo, se faculta al Poder Ejecutivo a implementar, a través de la Arca (exAfip) y Anses, regímenes especiales de pago y medidas impositivas que incluyan la prórroga de vencimientos y exenciones impositivas, en forma extraordinaria y por única vez, en las zonas afectadas.
Tolosa Paz destacó la “voluntad de consenso” entre los diputados y apuntó que se tomó como antecedente la emergencia declarada en Córdoba el año pasado por los incendios forestales. “Lo que pasó en Bahía Blanca es un fenómeno excepcional, tiene que ser atendido en el marco de esa excepción”, afirmó la legisladora.
El libertario Espert, que estuvo en Bahía Blanca el último viernes, ponderó la visita de Milei este miércoles y, aunque votó a favor del proyecto de Tolosa Paz, consideró que “las obras de infraestructura tienen que estar hechas por los gobiernos provinciales y municipales” y que hay que “cargar menos las tintas en el Gobierno nacional”.
Uno de los discursos más conmovedores fue el de la radical Karina Banfi, oriunda de Bahía Blanca. “Nunca imaginamos algo así. Nosotros tenemos problemas de sequía, para nosotros la lluvia es una bendición. Nosotros sabemos de vientos, sabemos de tornados, sabemos cómo refugiarnos, pero nos tapó el agua. Tenemos a toda la ciudad bajo al agua. Algunos por suerte unos centímetros, a otros les llegó el agua unos metros, algunos perdieron algunas cosas, otros perdieron todo, y otros perdieron la vida”, relató.
Y continuó: “Es inexplicable la angustia de aquellos que nos hemos salvado. Hoy somos todos damnificados; nadie se salvó. La ciudad está bajo el agua, los clubes, las escuelas, la universidad, las casas de nuestros vecinos están bajo el agua”.
“Estamos devastados, pero estamos enteros. Y sabemos qué necesitamos: tomar este tiempo con sensatez y mesura. Porque sabemos que lo peor está por venir, porque cuando baje el agua nos va a matar el olor a humedad, mezclado con olor a mierda en el barro. Va a ser insostenible. Cuando baje la adrenalina y el shock, nos va a agarrar la desolación. Necesitamos más política, y no menos política. Necesitamos grandeza, y no miseria”, remató Banfi.
