“Lo noté muy comprometido y tiene la vocación de trabajar en armar un nuevo espacio nacional”, fue la primera sensación que expresó Juan Manuel Urtubey, después de reunirse con el gobernador Juan Schiaretti, el miércoles pasado.
El mandatario cordobés encabeza un grupo de dirigentes, la mayoría de ellos de origen peronista, que busca construir una alternativa entre el gobernante Frente de Todos y Juntos por el Cambio. La alianza opositora hoy concentra las mayores expectativas de volver al poder el año que viene, producto del fracaso económico de la gestión del presidente Alberto Fernández.
Schiaretti ya dio algunas pistas sobre las columnas conceptuales de esta incipiente propuesta, que lo tiene como el máximo referente por su trayectoria y por gobernar durante tres períodos a Córdoba, el segundo distrito electoral del país.
En lo político, Schiaretti pregona un distanciamiento absoluto del kirchnerismo, aunque también marca diferencias con el macrismo, pese a su conocida buena relación con el expresidente Mauricio Macri.
“El kirchnerismo y el macrismo ya fracasaron en sus gestiones”, repite el mandatario cordobés, en público y en privado.
En lo económico; un sesgo productivista y federal. “Tenemos que trabajar para hacer de una buena vez un país más federal”, repitió Schiaretti, la semana pasada, cuando disertó en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Reunión reservada
Urtubey evitó los detalles de la charla reservada que mantuvo con Schiaretti, que fue sin testigos.
No obstante, el dirigente salteño se mostró convencido de que Schiaretti, como los dirigentes con quienes están dialogando, deben “hacer públicas sus ideas”.
“Hay un clima de pesimismo en la sociedad por los fracasos de los gobiernos de los últimos años. Es necesario mostrar que se puede construir un país distinto. Juan (Schiaretti) y el grupo de dirigentes que nos estamos reuniendo estamos convencidos de que se pueden hacer cosas distintas a las que se vienen haciendo y fracasando ininterrumpidamente”, argumenta el salteño, en diálogo con La Voz.
El exgobernador de Salta trabajó con el mandatario cordobés en el año 2018. Fundaron el espacio republicano y federal que luego fue bautizado como “Peronismo Federal”.
Aquel intento diferenciador entre el entonces gobernante Cambiemos y el cristinismo naufragó cuando Cristina Kirchner lanzó la sorprendente candidatura presidencial de Alberto Fernández, y ella se ubicó en un no menos llamativo segundo escalón de la fórmula.
“Cometimos muchos errores en aquel momento. Creo que la experiencia ahora nos va a servir para no repetirlos”, admite ahora Urtubey.
Ante la pregunta concreta de cuáles fueron esos errores, el dirigente salteño sintetizó: “Tal vez hubo algunas vanidades y mucha preocupación en pensar en candidaturas y en quién estaba mejor posicionado para liderar el espacio. Ahora, en mi caso personal, me despojo de cualquier preocupación por las candidaturas. Quiero trabajar en algo nuevo, distinto, que no repita el fracaso del kirchnerismo y del macrismo”, afirmó el exmandatario salteño, evitando los nombres propios.
–Pero ¿usted aspira a ser candidato presidencial de este espacio?
–Le repito. No debemos pensar en las candidaturas. Hay que consolidar un espacio con un programa concreto de gobierno que entusiasme a la gente. Después se verá quién es el candidato presidencial. En todo caso, las naturales aspiraciones de cualquier dirigente se pueden dirimir en las Paso. Hay que darle musculatura al espacio, y que luego la gente elija, si es que no hay consenso por el candidato presidencial. En lo personal, no tengo ninguna aspiración. Ahora, si el espacio y las circunstancias deciden que yo tenga que ocupar algún rol electoral, lo haría. Todos los que estamos en la política debemos estar dispuestos a asumir responsabilidades, pero no es el momento para hablar de candidaturas. Mire, yo tengo un gran alivio en este momento. Hago política desde hace tres años sin ningún cargo. Y me siento muy bien. Ahora, si hacés política, en algún momento tenés que asumir responsabilidades. Otra cosa es andar reclamando lugares en las listas. Eso no va más.
–¿Lo ve a Schiaretti como candidato presidencial?
–Sí, claro. Siempre dije que tiene la experiencia y las ideas para liderar un espacio productivista y federal. Pero también depende de una decisión personal. Yo lo veo comprometido con esta idea de trabajar para construir algo nuevo para salir de esta mediocridad y falta de expectativas a las cuales nos empujaron el kirchnerismo y el macrismo.
–Suena bien un discurso crítico en contra del kirchnerismo y del macrismo, ya que nos les fue bien en las gestiones, ¿pero qué chances reales tienen de armar algo nuevo para disputar poder en serio?
–Es un planteo interesante y del cual hemos hablado. Con Juan (Schiaretti) y con los dirigentes que venimos hablando, intentamos generar un espacio que dispute el poder en serio. El candidato o los candidatos de nuestro espacio que compiten en las Paso deberían sacar al menos 20 puntos. No es la idea de competir para sacar cinco puntos. Le cuento algo personal. Me preguntan qué chances reales tenemos en armar algo serio para disputar poder, y yo le respondo: todas. Muchas veces me desespero, porque veo que la gente está cansada de tanta mediocridad y quiere apostar por algo distinto, pero sin recurrir a una propuesta extremista (aunque no lo menciona, se refiere a Javier Milei). Hay que trabajar en consensuar algo nuevo para volver a entusiasmar a la gente, que no quiere saber más nada con estos tipos, me refiero al actual gobierno y al anterior.
Como Schiaretti, quien ha dicho en reuniones reservadas “lo voy a intentar y llegaré hasta donde me dé el impulso”, Urtubey admite que no es fácil “saltar la grieta por arriba”, como también pregona el mandatario cordobés.
“Es muy simple, en un escenario complejo. Los dirigentes que nos estamos reuniendo somos optimistas de poder armar algo serio, pero tampoco tenemos la seguridad de que lo lograremos. Pero hay que intentarlo, de eso no tengo dudas. Y en eso estamos”, concluyó el salteño, antes de dejar Córdoba, donde disertó en una jornada sobre infraestructura, organizada por la Cámara Argentina de la Construcción, delegación Córdoba.
Con quiénes habla
Más allá de la buena relación con el exgobernador de Salta, Schiaretti viene dialogando con distintos dirigentes nacionales, además del mencionado Urtubey.
El nuevo espacio que intenta liderar el gobernador cordobés se comenzó a construir en el Congreso Nacional.
El diputado Carlos Gutiérrez, un dirigente de confianza de Schiaretti, es el principal operador nacional.
Mantiene diálogo con los peronistas federales Florencio Randazzo; Graciela Camaño; el lavagnista Alejandro “Topo” Rodríguez, y Emilio Monzó, entre otros peronistas, no kirchneristas.
Según voceros schiarettistas, el primer ministro de Economía de Néstor Kirchner lo alentó a seguir trabajando en construir un nuevo espacio.
Schiaretti se encarga personalmente de dialogar con gobernadores peronistas como Omar Perotti (Santa Fe); Gustavo Bordet (Entre Ríos); Sergio Uñac (San Juan); Arabela Carreras (Río Negro) y el exgobernador de esa provincia Alberto Wereltineck. También, con el referente de Misiones, el exradical Carlos Rovira, entre otros.
El gobernador también dialoga con el intendente de Rosario, Pablo Javkin, y con la diputada nacional Margarita Stolbizer, con quien tiene un acuerdo en Córdoba.
Tal vez las conversaciones más avanzadas son con el diputado radical Facundo Manes. Con el neurólogo tienen muchas coincidencias, pero una diferencia de estrategia electoral, al menos por ahora insalvable: Schiaretti descartó de plano participar de una interna en Juntos por el Cambio y en el Frente de Todos, mientras el dirigente radical reiteró que no romperá la alianza opositora.
Los dirigentes schiarettistas aseguran que el gobernador hará campaña hasta fin de año, incluso durante el Mundial de Fútbol de Qatar. A Urtubey y a todos los que lo escucharon en los últimos días les aseguró que su intento de proyección nacional “va en serio”. El tiempo dirá.
