El Poder Ejecutivo tomó distancia de la intención de la vicepresidenta Cristina Kirchner de ampliar la Corte Suprema de Justicia después de su fallo sobre el Consejo de la Magistratura, mientras que la oposición cuestionó que el tema se ponga en agenda y advirtió que el oficialismo no tiene los dos tercios para nombrar a nuevos jueces supremos.
Luego de confirmarse que el Frente de Todos convocará a debatir los proyectos para reformar la Corte el próximo miércoles en la Comisión de Asuntos Constitucionales, la portavoz del Gobierno, Gabriela Cerruti, sostuvo que “se trata de un conflicto de poderes entre el Poder Legislativo y la Corte”.
En su conferencia de prensa en Casa Rosada, Cerruti señaló que “es el Poder Legislativo el que fija su propia agenda, salvo cuando el Ejecutivo envía sus proyectos”, con lo cual dejó trascender que el presidente Alberto Fernández no mandará ninguna iniciativa propia.
Además, la funcionaria evitó responder si Fernández está de acuerdo con ampliar la composición de cinco miembros. “Hay una comisión de expertos que trabajó sobre el tema”, se limitó a contestar, en alusión al grupo de juristas que formuló recomendaciones sobre diferentes reformas en el Poder Judicial.
Para la oposición, pura distracción
La oposición recibió con sorpresa la iniciativa de Cristina y ya encendió luces de alarma. “Es juego para la tribuna. Lo que están buscando es política de distracción. Procuran salir rápido de lo que han hecho esta semana”, advirtió el jefe del bloque de diputados radicales, Mario Negri, en relación a la ruptura del Frente de Todos en el Senado.
Negri sumó otro argumento: el Frente de Todos está lejos de conseguir los dos tercios de los votos necesarios para avalar a un nuevo juez de la Corte, con lo cual sería inútil aumentar cargos que luego no se podrían completar. De hecho, el máximo tribunal hoy tiene cuatro integrantes de los cinco, porque sigue vacante el lugar que dejó Elena Highton en octubre.
Por su parte, el líder del interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, Alfredo Cornejo, alertó que “hay una agenda de Cristina prácticamente monotemática. La Argentina tiene un deterioro social que arrastra desde hace muchos años, y ella no tiene esa agenda, sino la agenda de las causas judiciales”.
El mendocino también enfatizó que la titular del Senado “se apalanca en el sentir popular” sobre el mal funcionamiento de la Justicia “para influir en la Justicia Federal de Comodoro Py, la que maneja las causas judiciales de ella”.
“Le da al tema un barniz de gravedad institucional, cuando lo único que le importa es manipular el Consejo de la Magistratura y la designación de algunos jueces en particular. Ella está enfocada en esa agenda que no tiene nada que ver con el común de los argentinos y nos ha enredado a todos en discutir eso”, lamentó en diálogo con radio Mitre.
El Interbloque Federal también cuestionó la oportunidad del debate, al advertir que “no hay clima institucional” para tratar una ley como esta. Fue tras una reunión que mantuvieron este viernes los diputados de esa bancada con el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, en el Centro Cívico.
“Cualquier proyecto de la envergadura que significa reformar la Corte Suprema sólo es posible a través del consenso, y no hay una intención de consensuar; la única intención es la de profundizar la grieta que tiene de rehenes a los argentinos”, aseguró la senadora Alejandra Vigo (Córdoba Federal), también presente en el encuentro.
En un mismo sentido, Alejandro “Topo” Rodríguez, quien encabeza el interbloque en Diputados, sostuvo que el Gobierno nacional debe “resolver la crisis derivada de la inflación, y no intentar distraer a la sociedad con debates que no son prioritarios”.
“No tenemos claro que haya un proyecto de reforma de la Corte que tenga lo que requiere cualquier ley de este tipo: maduración del diálogo, consenso y clima institucional. El Gobierno debe ocupar su tiempo en resolver la crisis derivada de la inflación, no distraer a la sociedad. No se puede seguir dinamitando la confianza de la sociedad y los inversores”, consideró.
El mensaje de Martínez
Por otra parte, se filtró un video que Germán Martínez grabó para su tropa de diputados desde Rosario para transmitir “tranquilidad” después del amparo que presentó contra la designación de la radical Roxana Reyes en el Consejo de la Magistratura, firmada por el propio titular de la Cámara, Sergio Massa.
“No se asusten: que estemos discutiendo la designación que firmó Sergio de la diputada Reyes no implica que no haya diálogo, ni que estemos enojados, ni que desautoricemos al presidente de la Cámara. Sergio tiene que cumplir su rol como presidente de la Cámara y nosotros tenemos que cumplir un rol como bloque parlamentario”, dijo Martínez en el video, que difundió Infobae.
Además, pidió a sus diputados que “no dejen de criticar el fallo de la Corte” por las consecuencias que ocasionó; que “no abandonen el reclamo” respecto de que les corresponde “una banca más” en el Consejo; y que insistan en que quieren sancionar una nueva ley para regular el organismo.
