La aparente decisión del Gobierno nacional de “saturar” de fuerzas de seguridad la ciudad de Rosario podría tener como consecuencia un “derrame” hacia Córdoba, en búsqueda de nuevos mercados. Con esta hipótesis de conflicto sobre la mesa, los fiscales generales Juan Manuel Delgado (provincial) y Alberto Lozada (federal) aseguraron a La Voz que las fronteras fueron “reforzadas”, y que la coordinación entre ambas jurisdicciones será clave.
“Cuando las fuerzas federales refuercen la presencia en la provincia de Santa Fe, con particular énfasis en Rosario, es muy probable que acciones de narcotráfico se trasladen hacia otras provincias, Córdoba entre ellas”, dice Alberto Lozada, el fiscal que actúa ante la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba, quien reconoce que ve con “preocupación” la situación, aunque confía en el nuevo vínculo con el Ministerio Público Fiscal de Córdoba.
Respecto de este punto, desde hace pocos meses rige un convenio entre ambos organismos, con el objetivo “agilizar y coordinar” las acciones de persecución e investigación. Ambos funcionarios aseguran que hay pesquisas conjuntas en marcha.
En ese sentido, Juan Manuel Delgado, titular del Ministerio Público Fiscal, confirmó que “hay una previsión” respecto de un “eventual derrame” de acciones de narco hacia Córdoba.
“Es difícil saber qué va a pasar, porque desconocemos qué hará el Gobierno nacional en Rosario. Sin embargo, se reforzaron las fronteras y se mantienen las acciones coordinadas de fiscales federales y provinciales e investigadores de ambas jurisdicciones”, señaló Delgado.
El despliegue más ordenado está a cargo de la Fuerza Policial Antinarcotráfico (FPA), que tiene bajo su jurisdicción la persecución del narcomenudeo, aunque no del narcotráfico, que se mantiene bajo la órbita federal.
Esta fuerza, considerada de elite por su equipamiento y entrenamiento, fue pertrechada recientemente con 30 efectivos enviados por la Policía de la Provincia. La FPA destinó 80 efectivos para reforzar los puestos móviles del sudeste cordobés, región que tiene como punto neurálgico la ciudad de Marcos Juárez.
Allí se instalará una sede de la FPA una vez que el Ministerio de Obras Públicas culmine la obra civil. El proyecto ya fue terminado, pero hay que esperar la licitación de la obra. La Fiscalía General pidió que el edificio fuera prioritario. Por ahora, mantiene tres puestos móviles en la zona, además de los investigadores.
Entretanto, el miércoles se comenzó el proceso de licitación para la adquisición de los equipos y pertrechos para los nuevos agentes de la FPA.
Además de los grupos de irrupción (que intervienen en los allanamientos), la FPA cuanta con células de investigadores. “El objetivo no es cerrar un ‘quiosco’, sino desbaratar pequeñas redes que incluyan al proveedor zonal. La información que surge de las causas narcomenudeo es enviada a la Justicia federal para que se enfoque en los cargamentos y el lavado de activos”, explica el fiscal en Delitos Complejos Bernardo Alberione, con jurisdicción en San Justo.
Frontera caliente
Desde uno de los puntos calientes de la frontera Córdoba y Santa Fe, Alberione dice que debe haber una “suma de factores” para tener éxito en una investigación narco: él considera que el trabajo de investigación de la FPA es clave, a lo que debe sumarse la coordinación de fuerzas de seguridad y con la Justicia federal.
Alberione no lo menciona, pero sobrevuela el nombre del exfiscal federal Luis Viaut, condenado a cinco años de prisión por pedir coimas en causas comunes. En la Justicia provincial, hay quienes sospechan que Viaut podría haber entorpecido la investigación de los proveedores.
“Una investigación de narcomenudeo que incluya al proveedor local demora entre seis meses y un año desde la denuncia anónima hasta lograr un allanamiento con detenciones y secuestro de droga, que es lo que garantiza condenas”, explica Alberione.
Defensor del trabajo de la FPA, Alberione destaca que la presión sobre la frontera tiene como principal éxito que el peligroso “Yiyo” Ramallo, un narco oriundo de Rafaela que comanda su organización desde el penal de Marcos Paz, no pueda cruzar el límite provincial: intentó hacerlo por Morteros, pero fue repelido.
¿Córdoba es Santa Fe? Para Alberione, no. Da un ejemplo que es central: él no está amenazado, que es algo común entre los fiscales de esa provincia.
