En dos semanas exactas, los cordobeses volverán a las urnas por tercera vez en 50 días. Lo harán para ser parte del pulido nacional de la oferta electoral de cara a la renovación presidencial que tendrá el 22 de octubre su primera parada determinante.
Pero, como ya sucedió anteriormente, las Paso en la Argentina a veces funcionan como si fueran algo más que unas internas abiertas. Basta recordar 2019, cuando Alberto Fernández quedó prácticamente consagrado como el sucesor de Mauricio Macri gracias a la holgada diferencia obtenida en esas primarias.
Ahora, con un frente económico más acuciante aun que aquel, el escenario electoral muestra una pintura distinta que comenzará a exponerse cuando se exprese la ciudadanía a través del voto.
Además de ordenar la oferta electoral presidencial -habrá 27 listas para la categoría mayor- con vistas a la primera vuelta, Córdoba renueva este año nueve de sus 18 diputados nacionales. Y, aunque en las Paso esas butacas no estarán en juego, sí el resultado marcará un primer indicio de cómo podría darse el reparto de esos escaños en octubre.
Schiaretti, factor especial
En Córdoba, la novedad política que representa la participación como precandidato presidencial del gobernador Juan Schiaretti es un condimento extra.
El mandatario provincial se postula por Hacemos por Nuestro País, una coalición que no tendrá competencia interna, pero que tiene el desafío prioritario de cosechar votos fuera de la provincia Córdoba. Ya en 2015, cuando se postuló para el mismo cargo el fallecido José Manuel de la Sota, quedó demostrado lo cuesta arriba que se les hace a las expresiones que carecen de anclaje político fuerte en la provincia de Buenos Aires destacarse a nivel nacional.
Impulsado por el triunfo provincial y capitalino del gobernador electo Martín Llaryora, el peronismo cordobés descuenta en poder superar el piso del 1,5% que requiere la ley electoral para acceder a la candidatura que permite competir en la primera vuelta electoral.
Schiaretti y especialmente Llaryora -que es quien gobernará con el próximo presidente- están pensando en los diputados que podrían conquistar para desde el 10 de diciembre sentar en un nuevo Congreso que renueva la mitad de su Cámara Baja y un tercio de la Alta. En esa categoría -central para las negociaciones futuras de Llaryora- están depositadas las mayores expectativas de peronismo cordobés.
Hace sólo algunos días, Schiaretti ratificó su idea de formar parte de un gobierno de coalición con sectores moderados de Juntos por el Cambio.
Larreta-Bullrich, “la” interna
Precisamente es en ese espacio en el que aparece el capítulo más jugoso de las próximas elecciones primarias. La ardua y, a priori, pareja disputa nacional que llevan adelante los precandidatos Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich dentro de Juntos por el Cambio genera una atracción especial que se alimenta casi a diario con fuertes cruces en un “mano a mano” en el que ambos contendientes se muestran convencidos de que la victoria podría convertirse en casi el pasaporte a la conducción de la Casa Rosada.
En Córdoba, esa disputa tiene dividida a la dirigencia de Juntos por el Cambio. Los sondeos previos hablan de una ventaja para Bullrich en este distrito, pero en el larretismo se entusiasman con los yerros estadísticos de casi todos los últimos comicios.
En las últimas horas, los alineamientos comenzaron a exponerse públicamente. Por ejemplo, a muchos sorprendió que el radical Rodrigo de Loredo -que viene de perder los comicios capitalinos hace una semana- se hubiera pronunciado a favor del alcalde porteño, en un posicionamiento que tiene un correlato con la línea radical nacional de Evolución a la que pertenece.
Ese blanqueo público de De Loredo tuvo un efecto en el resto de la dirigencia cambiemita, aunque hay otros dirigentes como Ramón Mestre, Juan Negri o Marcelo Cossar, entre otros, que ya se habían expresado a favor de Larreta.
Del otro lado y siempre hablando solamente de la UCR, Marcos Carasso, Soledad Carrizo y Diego Mestre, por ejemplo, son parte del equipo de Bullrich.
Mario Negri, quien no disputa candidaturas en esta oportunidad, mantiene diálogo con ambos precandidatos. Algo parecido sucede con Luis Juez, que ha dejado trascender que recién tras las Paso dará su apoyo al candidato que compita en octubre.
Juntos por el Cambio tiene una larga tradición de triunfos legislativos y presidenciales en Córdoba que datan de 2015, con la irrupción de Macri en la escena nacional. La coalición espera poder celebrar con la sumatoria de Larreta y Bullrich, aunque la presencia de Schiaretti en el juego y en su territorio hace moderar las expectativas.
La coalición opositora también va dividida en las listas a diputados nacionales. El exintendente de Marcos Juárez y figura del PRO, Pedro Dellarossa, lidera la boleta de Larreta, mientras que el jefe municipal de Jesús María, Luis Picat, es el principal crédito de Bullrich.
Massa, en el distrito más anti-K
Electoralmente, Córdoba es una incomodidad inmensa para el oficialismo nacional. La provincia más anti-K del mapa no es precisamente un reservorio de adhesión a las políticas encarnadas por el kirchnerismo. Sergio Massa tiene agendada para esta semana su primera y posiblemente única visita a la segunda provincia más importante del país.
Con registros pasados apenas por encima de los dos dígitos en el tramo legislativo, el escenario actual es bien diferente al de 2021, donde Fernández perdió 61% a 29% contra Macri en la primera vuelta en la provincia.
El piso de adhesión que podría lograr Unión por la Patria -sumadas las expresiones de Massa y de Juan Grabois- es uno de los principales misterios de las próximas Paso.
Milei, la gran incógnita
El otro gran dilema electoral en el distrito que representa el 8,8% del padrón electoral lo representa Javier Milei.
El líder libertario casi no tiene estructura propia en Córdoba y apuesta a que la potencia de su figura sea suficiente para atraer a los votantes desencantados con los políticos tradicionales.
¿Podrá pelear el podio de las fuerzas más votadas en Córdoba junto con Schiaretti y la sumatoria de la interna de Juntos por el Cambio? Sus referentes locales aseguran que darán la sorpresa.
