Horacio Rodríguez Larreta sorprendió al confirmar que participará en las elecciones de legisladores porteños, previstas para el 18 de mayo. El anuncio del exjefe de Gobierno alimentó la posibilidad de un acuerdo en territorio porteño con del partido nacional Hacemos que fundó Juan Schiaretti.
La novedad fue que Rodríguez Larreta oficializó que su espacio político (Movimiento al Desarrollo) competirá en mayo las elecciones legislativas porteñas, sin precisar si será candidato en los comicios porteños o los nacionales de octubre.
El exjefe de Gobierno porteño nunca interrumpió el diálogo con Schiaretti, que está cerca de conseguir que la justicia electoral nacional reconozca a su partido Hacemos, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba).
“Hace tiempo que venimos hablando con Larreta y otros dirigentes, en el armado de un espacio que marque diferencias con el kirchnerismo y los libertarios. No hay nada confirmado, pero con “el Pelado” (Rodríguez Larreta) hay dialogo y no habría que descartar un acuerdo electoral en Caba”, explicó uno de los dirigentes cordobeses que trabaja con el exgobernador.
Larreta no tenía más tiempo para demorar el lanzamiento de su nueva propuesta política, a partir del Movimiento al Desarrollo, ya que en 20 días vence el plazo para presentar las listas para las elecciones de 18 de mayo, cuando se elegirá la mitad de la Legislatura porteña.
Más allá de las urgencias de Larreta, los schiarettistas remarcan que el objetivo de Hacemos que está construyendo el exgobernador es competir en octubre, en las elecciones legislativas nacionales.

El exgobernador y su equipo de trabajo más cercano, que integran la senadora Alejandra Vigo, el diputado Carlos Gutiérrez y Carlos Massei (secretario de Integración Regional de la gestión del gobernador Martín Llaryora), es que Hacemos llegue a octubre con el reconocimiento de la justicia electoral nacional en 16 provincias. Hoy ya lo tiene en ocho distritos.
Desdoblamiento
Por una estrategia que trazó su primo, el expresidente Mauricio Macri, el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, decidió desdoblar los comicios locales de Caba de los nacionales, convocando a votar para legisladores el 18 de mayo, además, de suspender las Paso porteñas.
Esta decisión apuró los tiempos de Larreta, quien venía dialogando con Schiaretti y otros dirigentes nacionales, como los radicales Martín Lousteau y Facundo Manes. También con Elisa Carrió para conformar un espacio que se diferencie de los K y de los libertarios, en territorio porteño, pero también con un objetivo nacional.
En Caba, Schiaretti tiene como principal operador al economista Diego Bossio, extitular de la Anses, que hace años rompió con Cristina Kirchner.
Los schiarettistas admiten que la decisión de Hacemos es tener una estrategia particular en cada distrito.
En Caba, donde en octubre se elegirán senadores y diputados, el plan de Schiaretti es participar de un “espacio amplio” no kirchnerista y crítico de la gestión del presidente Javier Milei.
El exgobernador, por ahora, mantiene su decisión de no ser candidato en Córdoba, y menos en Caba, como vienen difundiendo desde hace tiempo dirigentes cercanos al gobernador Martín Llaryora.
Aunque el mandatario provincial no habló nunca en público del tema, sus colaboradores más cercanos repiten que Llaryora considera que para hacer crecer a Hacemos a nivel nacional, Schiaretti debería competir en Caba, donde está habilitado para hacerlo, por tener una propiedad desde hace más de dos décadas.
Schiaretti tiene otra idea, al menos por ahora. Ser el “armador” y líder nacional de Hacemos, sin competir en las urnas, ni siquiera en Córdoba.
Entre estos dirigentes nacionales que hablan con Schiaretti, cada uno pueden tener estrategias electorales distintas, sobre todo, para las elecciones porteñas.
Larreta y Lousteau están obligados a jugar, porque es su territorio político. No es el caso del nuevo espacio que lidera Schiaretti.
La Coalición Cívica de Elisa Carrió también anunció que competirá con candidatos propios en los comicios porteños. La lista para legisladores porteños la encabezará la diputada nacional Paula Olivetto.
Carrió tiene una excelente relación personal con Larreta, aunque aún no está definido si pueden alcanzar un acuerdo electoral para los comicios de mayo.
La otra incógnita que Larreta de develó es si será candidato a legislador porteño, o encabezará la lista de senadores o diputados, en octubre.
La misma incertidumbre rodea a Lousteau, quien aún no confirmó a qué será candidato. Aunque lo más probable es que el senador radical porteño busque su reelección en la Cámara Alta, una competencia que puede ser de alto riesgo, si compiten el macrismo, los libertarios, el PJ conducido por Cristina Kirchner, y el propio Larreta.
Una larga negociación
La relación política entre Rodríguez Larreta y Schiaretti viene del año 2023, cuando a pocos meses de las Paso presidenciales, intentaron ampliar la alianza Juntos por el Cambio.
En aquel momento, el entonces jefe de Gobierno porteño era precandidato presidencial, enfrentando a Patricia Bullrich en la interna de la principal alianza opositora.
En mayo, Larreta y Schiaretti hicieron público las negociaciones para que el exgobernador se sumara a Juntos por el Cambio, que cambiaría de denominación. El entonces gobernador de Córdoba hablaba de un “frente de frentes”.
Además, del PJ cordobés, también se sumaría otros dirigentes, como el liberal José Luis Espert, y la progresista Margarita Stolbizer.
Aquella movida tuvo un guiño del entonces presidente del radicalismo nacional, Gerardo Morales, además de otros referentes nacionales como Lousteau y Manes.
Quienes se opusieron enérgicamente a que el PJ cordobés se sumara al espacio fueron Patricia Bullrich, Mauricio Macri, y sobre todo, Luis Juez, quien era el candidato a gobernador opositor en Córdoba, enfrentando a Martín Llaryora, tratando de desalojar al PJ del poder provincial.
Luego de varios días de idas y vueltas, finalmente, Macri, Bullrich y Juez consiguieron su objetivo: obturar que el PJ cordobés se sumara a Juntos por el Cambio.
Macri y Bullrich estaban convencidos que Schiaretti jugaría a favor de Larreta en la interna entre los dos dirigentes del PRO. Mientras que Juez hubiera quedado muy mal parado, si un mes de los comicios en Córdoba, el PJ provincial se sumaba a la alianza opositora a nivel nacional.
Lo que siguió es conocido. Bullrich derrotó ampliamente a Larreta en las Paso de Juntos por el Cambio. Mientras que Schiaretti fue candidato presidencial por Hacemos por Nuestra Argentina. Consiguió superar el piso en la Paso de agosto y su cosecha de votos creció en octubre, alcanzando el 6,8% de los votos a nivel nacional.
La gran novedad de aquella Paso presidencial fue que La Libertad Avanza de Javier Milei que terminó como la fuerza más votada. Luego, en el balotaje, Milei derrotó al candidato Sergio Massa, bendecido por Cristina Kirchner.
Ahora, Schiaretti está embarcado en la construcción de Hacemos en todo el país. Con ese objetivo mantiene contactos con aquellos dirigentes nacionales con los cuales se sentó a negociar en 2023.
Los schiarettistas creen que no será posible una alianza en estas elecciones porteñas. Ponen todas las energías en los comicios legislativos nacionales de octubre, aunque no descartan seguir dialogando con Larreta y otros referentes nacionales.
Por ejemplo, en Santa Fe, Hacemos su sumó a la alianza oficialista Unidos, que encabeza el gobernador Maximiliano Pullaro, para los comicios de convencionales constituyentes de abril próximo.