El 1° de marzo, durante la Asamblea Legislativa, el presidente Javier Milei sorprendió con la convocatoria al “pacto de mayo” que se concretaría el próximo 25 de mayo, en la ciudad de Córdoba.
El gobernador Martín Llaryora, ubicado a pocos pasos del presidente de la Nación, en aquel inédito horario nocturno para un discurso de apertura de sesiones ordinarias del Congreso, fue uno de los sorprendidos.
Cuando le llegó la invitación oficial para participar de la asamblea legislativa, desde el Ministerio del Interior que conduce Guillermo Francos le dieron a Llaryora una recomendación: estar presente en el Congreso.
Hay que recordar que en aquellos días existía una fuerte tensión entre el Gobierno nacional y el Centro Cívico por la intempestiva embestida del presidente Milei contra Llaryora. Acusó al cordobés de ser uno de los responsables por la caída de la “ley ómnibus” en la Cámara de Diputados.
Llaryora fue uno de los gobernadores presentes en el palco de invitados, al lado de sus colegas el bonaerense Axel Kicillof y el catamarqueño Raúl Jalil.
Desde ese privilegiado sitio, Llaryora vio de cerca cómo el presidente Milei se tomó el tiempo para desviarse unos pasos en su camino hacia el estrado central para saludar afectuosamente al senador Luis Juez, el acérrimo rival político del gobernador.
En aquel momento, luego del discurso del Presidente, Llaryora fue muy cauto con la “cumbre de mayo”. “Mayo queda lejos”, dijo el gobernador en las escalinatas del Congreso, bajándole un poco el precio a la convocatoria.
Cambio de posición
Luego de aquellos cruces con la Casa Rosada, que tuvieron eco en una merma en la imagen del gobernador, Llaryora modificó su postura: se convirtió en uno de los gobernadores que más fogonea la aprobación de la “ley bases”. Además, le dio un respaldo sin fisuras a la convocatoria al “pacto de mayo”.
A 10 días de la cumbre, que el Presidente libertario la piensa como una “refundación” del país, hay dudas políticas sobre una posible postergación o suspensión, pero en Córdoba ya se está trabajando como si la cumbre fuera un hecho.
Luego de mucha incertidumbre y silencio, desde la Secretaría General de la Presidencia que conduce la enigmática Karina Milei, a cargo de la organización del evento, este miércoles por la mañana se concretó la primera reunión formal para el operativo de seguridad.
El ministro de Seguridad de Córdoba, Juan Pablo Quinteros, fue el anfitrión en la Central de la Policía de Córdoba de una reunión de trabajo con las fuerzas de seguridad nacionales.
Además del ministro Quinteros y la cúpula de la Policía de Córdoba, también estuvieron el titular de Gendarmería Nacional en Córdoba, el comandante mayor Carlos Fernández; y jefe de la Policía Federal en Córdoba, comisario inspector Fabio Ascona, entre otros funcionarios de seguridad.
En ese encuentro se oficializó algo que se venía manejando como una “posibilidad concreta”: el histórico Salón de los Pasos Perdidos del Palacio de Tribunales I será la sede de la cumbre que reunirá al presidente de la Nación, varios gobernadores y posiblemente expresidentes.
Hasta ahora se había manejado como otra opción el Centro de Convenciones Juan Bautista Bustos del complejo Ferial, pero esto quedó descartado por los representantes de la Casa Militar que se encarga de la seguridad del Presidente.
Una de las preocupaciones del operativo de seguridad es la posibilidad de una movilización de protesta contra el Presidente, impulsada por la CGT Regional Córdoba y organizaciones piqueteras.
Por lo que trascendió de la reunión en la Central de Policía, todo indica que la presencia del presidente Milei será breve: llegaría a las 16, encabezará la cumbre y no más allá de las 18.30 estaría volviendo a Capital Federal.
Claro que el operativo de seguridad no sólo alcanza al Presidente. Habrá entre 16 y 18 gobernadores que llegarán a Córdoba para participar de la cumbre.
De todos modos, como informó La Voz, el gobernador Llaryora ya sabía de lo breve que será la cumbre política, en horas de la tarde del 25 de mayo.
Por ese motivo, el mandatario provincial estará por la mañana en la ciudad de Río Cuarto, donde encabezará el desfile oficial de la provincia en la fecha patria.
Es parte de la estrategia política del gobernador, quien está metido de lleno en la campaña electoral en Río Cuarto, en respaldo al candidato a intendente del oficialismo Guillermo de Rivas, de cara a las elecciones municipales del 23 de junio.
Dudas políticas
Desde hoy, el “pacto de mayo” ya tiene el lugar de realización, pero el propio presidente Milei puso en duda su realización, el próximo 25 de mayo.
“Si no se hace el 25 de mayo, puede ser en junio o julio, no hay problemas”, aseguró el martes el jefe del Estado, bajándole las expectativas a la cumbre en Córdoba.
Mucho dependerá de la marcha de las negociaciones en el Senado para la aprobación de la “ley bases”.
Todo indica que el dictamen de comisiones pasaría para la semana que viene, por lo que en las próximas horas, en la Casa Rosada se tomará una decisión sobre la convocatoria al “pacto de mayo”.
Fuentes cercanas al gobernador Llaryora consideran que la cumbre se podría postergar, más allá de que en Córdoba ya tenía lugar para su realización.
