Sin el número garantizado para abrir la sesión ni tampoco para aprobar el proyecto, el oficialismo finalmente suspendió, con la firma del presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, la sesión prevista para este miércoles a las 11 por la ley de ficha limpia. La Libertad Avanza y bloques dialoguistas buscarán ahora una nueva fecha que asegure lograr la sanción de la norma, que inhabilita a las personas con condena confirmada en doble instancia por delitos de corrupción a ser candidatas a cargos electivos.
Tras una jornada de intensas negociaciones, senadores del oficialismo y de fuerzas dialoguistas decidieron enviarle una nota a la vicepresidenta Victoria Villarruel para que aplazara la sesión. La misiva fue firmada por el bloque de La Libertad Avanza, liderado por Ezequiel Atauche, junto a Alfredo De Angeli (PRO), Eduardo Vischi (UCR), Carlos Espínola (Unidad Federal), Juan Carlos Romero (Cambio Federal), Beatriz Ávila (Justicia Social).
“Nos dirigimos a usted solicitando el aplazamiento de la sesión citada para el miércoles 9 de abril, teniendo en cuenta los posibles inconvenientes que pueden generar las acciones que lleven adelante las asociaciones gremiales (por el paro general) y siendo que se requiere una mayoría calificada para la aprobación, podría ponerse en riesgo que la misma se concrete”, expresa la nota.
Acto seguido, los senadores pidieron que “se considere una nueva fecha que sea adecuada para lograr una verdadera y segura discusión” de la ficha limpia. Finalmente, Abdala (que había firmado la convocatoria la semana pasada en ausencia de Villarruel) emitió el decreto para dejar sin efecto la sesión.
La Libertad Avanza debió dar marcha atrás ante el peligro de que el proyecto aprobado en la Cámara de Diputados terminara estrellado contra la pared. Es que no solo se necesitaban 37 presencias para abrir la sesión, sino también para aprobar la ley, ya que se trata de una reforma electoral.
Esas mayorías no estaban aseguradas y, si la iniciativa resultada rechazada, ya no podía volver a tratarse este año. Fue la advertencia que hizo en los últimos días la principal promotora de la ley, la diputada Silvia Lospennato (PRO), en conjunto con el movimiento ciudadano que impulsó durante la última década la ficha limpia.
El oficialismo y aliados alcanzaban, en el mejor de los casos, 36 senadores. Habían confirmado su voto afirmativo en los últimos días dos senadores clave: los misioneros Carlos Arce y Sonia Rojas Decut, del Frente Renovador que gobierna la provincia. La incógnita sigue girando en torno a los santacruceños José Carambia y Natalia Gadano, quienes se mantienen en la ambigüedad.
Unión por la Patria está abroquelado en contra, en defensa de Cristina Kirchner, con condena de segunda instancia en la causa Vialidad. Pero en el bloque peronista hay dudas sobre la senadora jujeña Carolina Moisés, que no sigue órdenes de la expresidenta. En la última sesión hizo gestos al Gobierno: no dio quórum para voltear los pliegos de la Corte Suprema, y luego integró el pelotón de peronistas que votó a favor de Lijo.
La senadora cordobesa Alejandra Vigo, que presidió el debate como presidenta de la Comisión de Asuntos Constitucionales, pidió sin éxito no dilatar la ley. “Insisto en que debemos sancionar el proyecto de Ficha Limpia. No hay lugar para seguir dilatando este tema: el Senado debe sesionar y dar un paso clave hacia una política más transparente”, advirtió en redes sociales