Alberto Ariaudo, presidente del Concejo Deliberante de Catriel, en Río Negro, fue filmado mientras exhibía un arma en la sede municipal, tras una escalada de amenazas y hostigamientos contra la intendenta Daniela Salzotto.
Luego de ser denunciado y detenido, renunció a su cargo para evitar la prisión.
El hecho ocurrió el pasado viernes y quedó registrado en las cámaras de seguridad del municipio. No era la primera vez que Ariaudo protagonizaba episodios de violencia. Desde la gestión de Salzotto aseguran que los hostigamientos llevan más de un año, con mensajes intimidatorios enviados por WhatsApp y amenazas directas contra los funcionarios municipales.
Con arma en mano, el titular del Concejo Deliberante amenazó a la intendenta
Según informó la fiscal de Catriel, Analía Díaz, el ahora exfuncionario enfrenta acusaciones por coacción agravada, amenazas reiteradas y portación ilegal de arma de fuego.
En su audiencia judicial expresó arrepentimiento y presentó su renuncia al cargo, lo que le permitió evitar la prisión preventiva.
El fiscal jefe Gustavo Herrera explicó que, a cambio de su libertad, Ariaudo deberá mantener domicilio fijo, presentarse semanalmente ante la Justicia y no podrá acercarse a menos de 300 metros de la intendenta ni de las dependencias municipales.
Las amenazas y el trasfondo del conflicto
El conflicto entre la intendenta y Ariaudo habría escalado tras la presentación de un proyecto de ordenanza que impulsa controles de consumos problemáticos de sustancias en funcionarios municipales. Según fuentes del municipio, esa iniciativa habría sido el detonante de la reacción del expresidente del Concejo.
Las amenazas no eran nuevas. “Te voy a entregar a tus funcionarios en una bolsita”, “Ese va a ser boleta”, “Conmigo no te hagás el poronga porque te limpio”, son algunas de las frases que, según la fiscalía, Ariaudo habría enviado en reiteradas oportunidades a la intendenta y su equipo.
Qué pasará con la investigación
A pesar de la renuncia de Ariaudo, la investigación sigue en marcha. La fiscalía tiene cuatro meses para avanzar con la causa y determinar si el exfuncionario deberá enfrentar un juicio.
Desde el municipio de Catriel advirtieron que la situación expone una preocupante falta de límites en la política local, donde las amenazas y la violencia parecen haberse naturalizado. “La intendenta viene siendo violentada hace más de un año. Esto no puede quedar impune”, señaló el secretario de Gobierno, Daniel Delgado.
Mientras tanto, la comunidad de Catriel sigue con atención el desenlace de un escándalo que, más allá de la renuncia de Ariaudo, deja en evidencia las profundas tensiones dentro de la política local.