Pese a declarar que la situación está controlada y que el programa económico está sólido, el Gobierno no quiso correr riesgos y en la jornada posterior al sacudón político que le propinaron los gobernadores a través del Senado nacional vigiló de cerca el dólar e intervino en los mercados de futuro para evitar un salto en su cotización.
Operadores de mercado consultados por La Voz confirmaron que la rueda de este viernes estuvo balizada por volúmenes de oferta superiores al promedio diario, lo cual habilita a pensar que el Banco Central u otros organismos del Estado estuvieron activos, en especial en las posiciones más cortas.
El volumen total operado fue del orden de los U$S 2.200 millones, el más alto de todo el mes de julio.
Esto muestra el interés del Gobierno por transmitir la idea de que mantiene el control del mercado de cambios.
El esfuerzo realizado en este sentido le permitió mantener a raya la cotización de la divisa en $ 1.277,5 para fin de julio, que representa una caída de 0,31%. Esta fue la tónica de todas las posiciones, con diciembre cediendo a $ 1.440.
No obstante, la inquietud se percibió en mayor escala en el mercado informal donde el “blue” terminó la semana en $ 1.300, lejos de la valuación de $ 1.500 a los que llegó hace un año, pero por con el valor más alto de desde la salida del cepo.
En tanto, la cotización en el Banco Nación se mantuvo sin cambios en $ 1.255 para la compra y $ 1.275 para la venta. Para los minoristas el precio también continuó en los mismos valores del jueves en $ 1.230 y$ 1.280.
A su vez, las cotizaciones surgidas de las operaciones en la Bolsa dejaron un dólar MEP en $ 1.268 y un Contado con Liquidación en $ 1.271.
En otro orden, las reservas subieron U$S 260 millones a U$S 39.052 millones.
Cayeron las acciones y los bonos
La situación estuvo más complicada en el mercado de acciones, dado que hubo bajas tanto en Buenos Aires como en Nueva York.
El Merval cayó cerca de 3%, con bajas generalizadas. Lo mismo sucedió con los ADRS en Nueva York donde se registraron retrocesos superiores a 3% en algunos papeles bancarios. Los bonos promediaron caídas de 1% y el Riesgo País volvió a superar los 700 puntos.
El presidente, Javier Milei, había anticipado que las leyes aprobadas el jueves en el Parlamento podían provocar una baja de acciones y bonos, lo que haría subir la prima de riesgo soberano y, posiblemente, el dólar.
No obstante, el balance del primer día financiero post revés legislativo no fue del todo malo para el gobierno.
Al momento, los operadores aún confían en que habrá algún tipo de negociación para que Milei pueda sostener el veto o modificaciones en el plan económico para mantener las cuentas en orden.
El mercado todavía le da crédito a la frase “el equilibrio fiscal no se negocia” se mantendrá como la columna vertebral del gobierno de Milei.

Para reforzar esta idea, a poco de la apertura de los mercados el ministro de Economía, Luis Caputo, publicó un posteo con una particular interpretación de los hechos: “Es lo mejor que podía haber pasado”, dijo.
“El periodismo tradicional habla de la ‘derrota’ de ayer con frases como: ‘Duro revés para el gobierno’, ‘Golpe autoinflingido’, ‘torpeza política’, etc. Permítanme disentir y decir que lo de ayer, es lo mejor que pudo haber pasado”, señaló Caputo.
El jefe del Palacio de Hacienda enfatizó que “la casta política no va a cambiar nunca” y recordó que “son los mismos que vetaron a los jubilados el 82% móvil, que les robaron sus ahorros al llevarse las AFJPs, y que en el 2023 les bajaron las jubilaciones un 30 por ciento”.
El ministro remarcó que el actual gobierno “evitó el infierno hiperinflacionario que nos habían plantado, las jubilaciones ya recuperaron un 15 por ciento, y seguirán mejorando, ya que no nos desviaremos nunca del rumbo”.
“La táctica de la oposición es siempre la misma: cuando no están gobernando, van a hacer lo imposible por destruir al país, porque es su única posibilidad de volver a manejar lo que para ellos es el negocio de la política”, insistió el responsable de Economía.
Caputo sostuvo que “lo que necesita el país es que cada vez más gente se dé cuenta. Votaciones como la de ayer, son pruebas contundentes que confirman esto”.
Milei confía en que podrá estirar los plazos de la negociación política e incluso judicial para en caso de tener que aplicar los aumentos que disponen las leyes el impacto sea por poco tiempo, especulando con que un buen resultado en diciembre le permitirá tener un Congreso más afín en diciembre que le permita morigerar estos incrementos.