El presidente de Estados Unidos, Donald Trump ratificó este miércoles que Argentina no será eximida de los aranceles del 25% aplicados a las importaciones de aluminio y acero que ingresen a los Estados Unidos.
Esta medida tendrá un impacto muy significativo en las exportaciones argentinas hacia ese país, las cuales han promediado más de U$S 600 millones anuales en las últimas dos décadas.
Ante este panorama, el Gobierno de Javier Milei está evaluando las estrategias por seguir frente a esta nueva imposición.
Los argumentos de Trump
Trump argumentó su decisión señalando que Estados Unidos experimenta “un poco de déficit con la Argentina, como con casi todos los países”.
La única excepción que sugirió fue para Australia, un país con el que mantienen un superávit comercial y que, según Trump, “nos compra muchos aviones”.
Esta determinación representa un fuerte revés para Argentina, especialmente en el contexto del próximo viaje de Milei a Estados Unidos para asistir a la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC), donde existe la posibilidad de un encuentro bilateral.
El gobierno argentino tiene como objetivo lograr un tratado de libre comercio con Estados Unidos.
Los sectores más afectados
Según publica Infobae, las empresas que se verán más afectadas por los aranceles son Aluar y Tenaris.
Aluar, que destina el 40% de sus ventas al exterior a Estados Unidos, será particularmente perjudicada.
La consultora Analytica advirtió que, además de impactar negativamente en el ingreso de divisas, esta medida podría representar un duro golpe para las empresas locales.
En 2024, la industria siderúrgica experimentó una caída interanual acumulada del 22,6% según el Indec, mientras que la fundición de metales se contrajo un 17,6%5.
La industria del aluminio disminuyó un 1,8%, gracias a que exporta la mayor parte de su producción y tiene menos vinculación con el mercado interno, por lo que sufrirá un impacto más profundo de esta medida.