El Fondo Monetario Internacional (FMI) reiteró este jueves que comenzó formalmente la negociación con la Argentina por un nuevo programa de asistencia, al tiempo que comunicó que el Gobierno nacional decidió no avanzar en las dos últimas revisiones del acuerdo en curso lo cual posterga el desembolso de U$S 1.000 millones previstos para esta etapa.
El convenio vigente expira el 31 de diciembre de este año y, en consecuencia, Argentina queda atada a un duro cronograma de pagos correspondiente a la refinanciación que realizó el 2022 el ex ministro de Economía, Martín Guzmán.
De acuerdo a ese plan, el año que viene el país debe comenzar a pagarle al organismo los U$S 44.000 millones a los que accedió en 2018.
Las cuotas de 2025 son por un total de U$S 3.000 millones, divididas en partes iguales en ambos semestres.
La negociación que comenzó a transitarse apunta a aliviar el calendario ya previsto y, de acuerdo a lo manifestado por el Gobierno argentino, pretende que se incluyan fondos frescos que serían aplicados a fortalecer las reservas y respaldar la salida del cepo.
“Las autoridades han expresado formalmente su interés en pasar a un nuevo programa y las negociaciones están en marcha”, dijo Kozack, en una última conferencia del año del organismo que se realizó en Washington.
Actualmente está en marcha un acuerdo de Facilidades Extendidas que reemplazo al stand by suscripto en 2018, pero que a su vez fue ajustado en enero de este año por la administración de Javier Milei.
Este programa contempla una serie de revisiones y de desembolsos que estaban “calzados” para el pago de los vencimientos previstos.
Pero aunque el FMI destacó los avances los resultados del plan económico, el gobierno de Javier Milei decidió no avanzar en las dos últimas auditorias habilitaban al país a acceder a U$S 1.000 millones.
“No es raro que las autoridades dejen que un acuerdo existente expire sin completar todas las revisiones mientras están considerando pasar a un nuevo programa respaldado por el FMI”, dijo la portavoz.
El Ministerio de Economía confirmó esta decisión y el desembolso pendiente sería incluido como parte del próximo programa.
La decisión que se conoció hoy sorprendió dado que hace pocos días durante una presentación el vicepresidente del Banco Central, Vladimir Werning, incluía el giro de U$S 1.000 millones del FMI como evaluación de cómo quedarían las reservas hacia fin de año.
El Fondo insistió en que la implementación del programa de estabilización económica está teniendo resultados impresionantes, incluyendo la reducción de la inflación, el superávit fiscal y una mejora en las reservas internacionales.
También destacó la recuperación de la actividad económica y del poder adquisitivo de los salarios.
Kozack ratificó que los equipos técnicos del FMI continúan trabajando “de manera constructiva con las autoridades argentinas” para abordar los desafíos pendientes.
Si bien no se brindaron detalles sobre el nuevo acuerdo, se espera que las negociaciones avancen durante los próximos meses.
El ministro de Economía, Luis Caputo, anticipó que las conversaciones podrían completarse durante el primer cuatrimestre del año pasado.