Los nevus melanocíticos, más conocidos como lunares, son pequeñas manchas de color en la piel. Lo normal es que tenga un color uniforma marrón o negro con un borde bien definido que separa el luna de la piel circundante.
Generalmente no deben ser objeto de preocupación, a menos que se note cambios extraños en él, lo cual podría indicar la aparición de un melanoma.
Qué es un melanoma
Es un tipo de cáncer de piel y es el más grave, Según la página web de salud Mayo Clinic, este cáncer se desarrolla en las células que producen melanina, la cuales dan el pigmento que da color a la piel.
El melanoma también puede formarse en los ojos y, raramente, en el interior del cuerpo como la nariz y la garganta.
Si bien aún no se saben todas las causas de los melanomas, pero la exposición a la radiación ultravioleta (UV) de la luz solar o de las lámparas y camas de bronceado aumenta el riesgo de desarrollar un melanoma.
Cuáles son los signos de cáncer de piel
Un cambio en un lunar ya existente puede indicar que la enfermedad empezó a desarrollarse. Desde Mayo Clinic recomiendan una técnica a través de las letras ABCDE, que ayuda identificar las características de los lunares inusuales que pueden indicar melanomas u otros cánceres de piel.
- La A es de forma asimétrica: lunares con formas irregulares, como dos mitades de aspecto muy diferente.
- La B significa borde irregular: lunares con bordes irregulares, con muescas o festoneados, características de los melanomas.
- C es para los cambios de color: crecimientos que tengan muchos colores o una distribución desigual del color.
- La D se refiere al diámetro: un nuevo crecimiento en un lunar de más de 1/4 de pulgada (unos 6 milímetros).
- E es para la evolución: cambios a lo largo del tiempo, como un lunar que crece en tamaño o que cambia de color o forma. Los lunares también pueden evolucionar y desarrollar nuevos signos y síntomas, como picazón o sangrados.
El aspecto de los lunares cancerosos varían mucho. Algunos pueden mostrar todos los cambios que se mencionaron anteriormente, mientras que en otros casos pueden presentar una o dos características solamente.
Los especialistas médicos dicen que una señal de advertencia común de un lunar canceroso es un cambio de tamaño. El lunar a menudo se vuelve más grande, aunque también puede volverse más pequeño. Ambos cambios son motivo de preocupación.
Ante cualquier sospecha, es importante una revisión de lunares para descartar o confirmar la existencia de un melanoma. Estos pueden estar ocultos (ojo, uñas o boca) o no siempre empiezan como un lunar. Hay que prestar atención al desarrollo de un nuevo crecimiento pigmentado o de aspecto inusual en la piel.
Si se nota algo sospechoso, algún cambio o irregularidad, se recomienda consultar con médicos.
