En un mundo donde las enfermedades crónicas y la obesidad se multiplican, los especialistas de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard desarrollaron una herramienta sencilla pero clave a la hora de elegir una buena alimentación: el “Healthy Eating Plate”, conocido en español como el “plato para comer saludable”.
Esta guía visual reemplaza las antiguas pirámides alimentarias y busca ayudar a millones de personas a organizar mejor sus comidas, priorizando la calidad de los alimentos y la proporción adecuada entre ellos. Según los investigadores, el objetivo es claro: enseñar a comer bien sin complicaciones ni dietas restrictivas.

Cómo armar un plato perfecto según Harvard
El enfoque de Harvard nace del consenso científico actual: la salud depende en gran medida de lo que comemos. El doctor Anthony Komaroff, profesor de medicina en la institución, sostiene que “la nutrición es uno de los campos más determinantes de la ciencia médica de los últimos 50 años”.
Por su parte, Walter Willett, presidente del Departamento de Nutrición, explicó que el “plato saludable” fue diseñado en base a la mejor evidencia disponible. “Queríamos una guía práctica, basada en ciencia sólida, que ayude a tomar decisiones cotidianas que realmente impacten en el bienestar”, afirmó.
El modelo divide el plato en tres secciones principales y una serie de pautas complementarias, todas centradas en el equilibrio y la variedad.
El “Plato Perfecto” se organiza en porciones proporcionales y simples de aplicar:
- Verduras y frutas (la mitad del plato): deben ocupar el 50 % de la comida. Se recomienda incluir variedad de colores y tipos, priorizando las verduras frescas. Harvard aclara que las papas no cuentan como vegetales por su alto índice glucémico.
- Granos integrales (un cuarto del plato): la cuarta parte corresponde a granos integrales e intactos, como avena, arroz integral, quínoa, cebada o trigo integral. Estos alimentos ayudan a mantener estables los niveles de azúcar e insulina, a diferencia de los refinados.
- Proteínas saludables (el último cuarto): este espacio está reservado para fuentes de proteínas de calidad como pescado, pollo, legumbres y frutos secos. Los expertos recomiendan limitar las carnes rojas y evitar las procesadas.
Pautas clave para completar una alimentación equilibrada
Además de la composición del plato, el modelo de Harvard incorpora recomendaciones prácticas para sostener una vida saludable:
- Usar aceites saludables: optar por aceite de oliva, girasol o maíz, y evitar los aceites parcialmente hidrogenados.
- Beber con conciencia: elegir agua, café o té sin azúcar. Limitar los lácteos a una o dos porciones al día y reducir el consumo de bebidas azucaradas.
- Moverse más: la guía subraya que la actividad física diaria es “clave” para mantener el peso y el equilibrio metabólico.



























