Congelar alimentos es una práctica común en muchos hogares, ya que ayuda a prolongar su vida útil y mantener su seguridad alimentaria. Sin embargo, no todos saben que algunos productos pueden congelarse sin perder sus propiedades, lo que permite aprovechar mejor los ingredientes y reducir el desperdicio.
La ingeniera en alimentos Mariana Zapién, a través de un video en TikTok (@ingdetusalimentos), reveló tres alimentos que pueden congelarse sin alterar su sabor ni sus beneficios nutricionales: pan, arroz y pasta. Almacenados correctamente, estos productos no solo mantienen su calidad, sino que también pueden aportar beneficios para la salud.
Cómo congelar y descongelar pan, arroz y pasta
El pan es uno de los alimentos que más sorprende al ser congelado, ya que puede conservarse en buenas condiciones hasta seis meses. Durante este tiempo, el almidón que contiene sufre un proceso de reorganización que lo convierte en almidón resistente, un tipo de fibra beneficiosa para la salud intestinal. Para descongelarlo, Zapién recomienda tostarlo durante dos minutos por cada lado para recuperar su textura original.
El arroz cocido también puede congelarse en porciones individuales y mantenerse en buen estado por hasta dos meses. Además de preservar su calidad, este proceso reduce el riesgo de intoxicación por Bacillus cereus, una bacteria que prolifera en alimentos cocidos mal almacenados. Para descongelarlo, la mejor opción es calentarlo con un poco de agua durante cinco minutos.
La pasta cocida sigue el mismo principio que el arroz y puede conservarse en el congelador por dos meses. Para su descongelación, se recomienda hervirla en agua durante aproximadamente tres minutos. Al igual que el pan y el arroz, su congelación favorece la formación de almidón resistente, aportando beneficios digestivos.
Consejos para almacenar correctamente
Para que la congelación sea efectiva y los alimentos mantengan su calidad, es fundamental almacenarlos en recipientes herméticos o en bolsas con la menor cantidad de aire posible. De esta forma, se evita la formación de cristales de hielo y se preserva mejor su textura y sabor.
Incorporar la congelación como estrategia en la cocina puede ser clave para reducir el desperdicio de alimentos y optimizar su consumo sin perder calidad ni beneficios nutricionales.